¿Te apuntas a felicitar a ¨La Trini” por su Centenario?
Muchos exalumnos ya lo hemos hecho. Es muy fácil. Escribe unas líneas de felicitación, cuenta algún recuerdo y envíalo con una fotografía a [email protected]. Solo te llevará unos minutos.
JULIO RUÍZ FERNÁNDEZ (1972)
Alcázar de San Juan (Ciudad Real)
Pero es mucho más que esto lo que el colegio significa para mí. Haber sido alumno trinitario fue un privilegio y ser antiguo alumno, un orgullo.
Mi agradecimiento al profesorado no puede ser más sincero. Empecé en 2º EGB con la profesora Ángela. Luego con Ismael, Manolo y José María, con los que hemos aprendido tantos ríos, cordilleras, números, letras, deportes y lo que fuera necesario, que para todo valían y valen.
Después seguí aprendiendo y creciendo con los Padres Trinitarios: la riqueza en el lenguaje, el sentimiento y manera de recitar del Padre Manuel. La viveza, voz ronca y a la vez llena de afecto del Padre Emiliano, siempre dispuesto a ayudar y decidido a convertir en buenas personas a la pandilla de diablos que éramos. Y por supuesto el Padre Joselín, cuya sola presencia ya intimidaba, pero que con el tiempo fui descubriendo que detrás de esa coraza se encontraba uno de los hombres más buenos y campechanos que he conocido nunca, además de buen profesor, que gracias a él al salir a estudiar fuera muchos hemos dado sopas con honda a los demás en asignaturas como matemáticas.
Y por supuesto tantos buenos compañeros y amigos, chicos y chicas, con los que he pasado mi infancia y juventud, intentando engañar “al Pipi” para salir fuera de hora, tirando piedras de árbol en árbol en el pretil, cogiendo de sus copas el "pan y quesillo", cambiando cromos, jugando a las chapas y bolas antes de entrar por las tardes al colegio. Algunos accidentes sufridos, como cuando un día de lluvia resbalé de las barras verdes de hierro, que por entonces me parecían gigantes, y me rompí tres dientes.
No puedo dejar sin comentar las experiencias deportivas vividas en el colegio y concretamente mi pasión por el baloncesto en esa época. ¡Qué grandes equipos teníamos! Decir Baloncesto y Trinitarios era mucho decir por entonces, tanto en Alcázar como fuera del pueblo y de la provincia. No guardo ningún trofeo, individual o colectivo de entonces, pero sé que están a buen recaudo en las vitrinas de MI COLEGIO.
Finalizo con una felicitación y un deseo. Felicidades a la Familia Trinitaria por estos 100 años de nuestro cole, que casi me parecen pocos para la gran cantidad de experiencias y vivencias que podrían contar sus gruesos muros. Y mi deseo, que no es otro que, durante al menos otro siglo, muchos otros niños y niñas puedan recibir en Los Trinitarios lo mismo que a mí me intentaron transmitir: educación, humanidad, compañerismo, esfuerzo y que, acorde con el fin por el que se fundó la Orden Trinitaria de rescatar del cautiverio a los cristianos, consigamos que los alumnos trinitarios sean personas libres, con todo lo que eso implica en una sociedad como la actual, escasa de valores en muchos casos.
