ORGANIZADO POR LA CHIRIGOTA LOS FUIONAOS POR CUARTO AÑO CONSECUTIVO

Las chirigotas del Canijo y del Bizcocho pusieron en pie a un entregado auditorio en el Festival Hidalgo Chirigotero de Alcázar

El auditorio municipal de Alcázar de San Juan vibró anoche durante varias horas con las actuaciones de las chirigotas andaluzas “La silueta del Canijo” y la chirigota del Bizcocho, dentro de la cuarta edición del Festival Hidalgo Chirigotero que organiza cada año la Chirigota “Los Fusionaos” de Alcázar, que ya ha consagrado este festival al que acuden ciudadanos de toda España, tal como se pudo comprobar anoche en un auditorio sin un hueco libre.

Los del Canijo de Carmona fueron los primeros en actuar con sus “chuches”, a menos de cinco de pesetas, y su espectáculo denominado “No valemo un duro”. Vestidos de pipas, kikos, chicles, regaliz, caramelos pez, huevos Kinder o sugus de piña, interactuaron con un público entregado que disfrutó de ellos en dos ocasiones, ya que fueron también los del Canijo quienes cerraron el Festival, tras la actuación de la chirigota del Bizcocho, con una antología de sus actuaciones estrenadas en el Carnaval de Cádiz.

Tras esta actuación, la Chirigota de Los Fusionaos entregó dos hidalgos chirigoteros por parte de su presidente, Manuel Rubio, uno a Antonio Pedro Serrano, el canijo de Carmona, por su trayectoria, y otro a Antonio Álvarez “Bizcocho”, de San José de la Rinconada (Sevilla), por ser la chirigota revelación de este año. Además, y ya con la presencia de la alcaldesa de Alcázar, Rosa Melchor, se le hizo entrega del Hidalgo Chirigotero de Alcázar de San Juan a Eulalio Ramos Casero, que lleva más de 40 años participando en el Carnaval. El Festival fue presentado por Vanessa Rubio.

Tras esta entrega llegó el turno a los del Bizcocho con su espectáculo “No te vayas todavía”, que llegaron al escenario con Manué en su ataúd, al que llevan recorriendo todos los escenarios y velando su muerte. Los del Bizcocho, una revelación este año en el Carnaval de Cádiz, donde quedaron terceros, pusieron al público en pie en varias ocasiones con sus aplausos hasta el final, cuando se quitaron las pelucas y se entregaron a los allí presentes con música y hasta baile, en el que participó todo el auditorio. También cantaron “por la igualdad” a Alba, una de sus componentes.

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