La empresa alcazareña MMC Mantenimientos ha retomado su exitosa campaña denominada «Trae un amigo», para que se contrate el mantenimiento de la calefacción y caldera, con el objetivo de que sus propios clientes expliquen las bondades del contrato y se beneficien del mismo.
Según ha explicado el director técnico de la empresa, Jaime Santiago Palomino, a través de esta campaña, cada cliente que lleve un amigo para que contrate el mantenimiento recibirá un descuento del 50% en la próxima renovación de su contrato durante un año, al igual que el amigo que lo contrate, que el primer año sólo pagará el 50%.
Pero además, como la campaña no tiene límite de amigos, se podría dar la circunstancia de que al cliente le salga gratis su contrato anual o incluso que MMC le tenga que abonar una parte. Es decir, si lleva dos amigos, el contrato anual le sale gratis, si lleva tres, MMC le abonará el 50% del coste y así sucesivamente.
Hay que recordar que esta promoción especial de la campaña estará vigente hasta el próximo día 31 de diciembre de 2017.
MANTENIMIENTO
Hay que recordar las bondades del contrato de mantenimiento de MMC. Este contrato de mantenimiento incluye la revisión anual que marca la normativa, la asistencia 24 horas al día 363 días al año y mano de obra incluida en todas las intervenciones.
El precio del mantenimiento por año es de 84 euros más IVA en calderas de gas y de 95 euros más IVA en las de gasoil. «Además, llevamos siete años sin subir los precios gracias a la gran cantidad de gente que confía en nosotros», tal como apunta el director técnico de la empresa, que anima a sus clientes a participar en esta campaña de promoción que beneficiará, sino ninguna duda, tanto al cliente como al que lleven a la empresa alcazareña.
En cuanto al Plan Renove de calderas, Palomino ha informado que están esperando que salga la normativa, que se ha retrasado por la aprobación tardía del Presupuesto Regional.
Por último, desde MMC se recuerda la importancia de mantener las instalaciones de calefacción a punto: Por seguridad, ya que se evita cualquier problema de funcionamiento que pueda poner en peligro la integridad de las personas y de las cosas; por economía, porque con la puesta a punto del sistema de calefacción se consigue el máximo rendimiento con el menor consumo; y por tranquilidad, para evitar las molestias que puede suponer una avería en pleno invierno.
