¿Para qué el Instituto Municipal de Deportes y el Patronato Municipal de Cultura?

Por Equo Alcázar Vecinal

Los Organismos Autónomos se crearon para que como su título indica, fueran autónomos, dentro de la estructura del Ayuntamiento, con una dirección y presupuesto exclusivo. Con la creación de los Patronatos Municipales de Cultura y de Deportes, se apostaba por una mayor participación, sumando a la representación de los grupos municipales, la de los colectivos deportivos y culturales. Organizándose a través de las Juntas Rectoras y Consejos como garantía de participación vecinal  y de control de la actividad deportiva o cultural.

Pues bien, desde hace unas legislaturas, sobre todo las dos últimas, dichos organismos funcionan como autónomos, con dirección y presupuesto propio, pero sin ninguna participación y control (de grupos políticos y colectivos). Nos preguntamos si está cumpliendo sus funciones y de no ser así, plantearse si no sería mejor funcionar como una concejalía más, que es lo que más se parece en la práctica, y de esta manera estaría sometido directamente al control por el pleno municipal.

Analicemos los estatutos en su apartado de gobierno y administración. Dentro de los órganos de gobierno, está la Junta Rectora. En ella están representados los grupos políticos con representación municipal, las secciones deportivas y los clubes deportivos. En el Patronato Municipal de Cultura, artistas y asociaciones culturales, junto con los grupos políticos. Pues bien, durante la pasada legislatura nunca se reunió la Junta Rectora, y en esta, de la que llevamos ya cerca de tres años, se ha reunido tres veces para dar el visto bueno al presupuesto, eso sí, todo en la misma reunión, sin dar margen a que los miembros de la Junta lo consulten con sus representados. Los estatutos dicen que se debe reunir una vez al mes.

Veamos que dicen los estatutos, teniendo en cuenta que la Junta Rectora es el órgano colegiado que asume el Gobierno y gestión. Y tiene, entre otras, estas atribuciones, que no se cumplen:

A) De orden general: Aprobar y modificar la organización general del Instituto, sus servicios y departamentos. Aprobar los convenios, conciertos y demás instrumentos de colaboración y cooperación con otras administraciones públicas, organismos, entidades o cualesquiera otras personas físicas o jurídicas. Aprobar los programas anuales de actuación y sus modificaciones. Crear los nuevos servicios que se consideren necesarios para el desarrollo de los fines previstos en estos Estatutos. Aprobar la memoria anual de gestión que será presentada por la Gerencia. Ordenar las actuaciones inherentes a las facultades de inspección, conservación y utilización de las instalaciones deportivas de la propiedad municipal. Constituir comisiones especiales con consejeros/ as y/o profesionales para estudiar, analizar y sugerir soluciones a temas concretos del ámbito de las competencias.

B) En materia económica: Planificar el funcionamiento económico del Instituto. Aprobar el proyecto de presupuesto. Proponer al Pleno del Ayuntamiento el establecimiento y/o regulación de tributos y precios públicos. Celebrar cualquier tipo de contratos cuando su cuantía o duración rebase los límites de las atribuciones del Presidente. Otorgar subvenciones de conformidad con la legislación aplicable.

C) En materia de personal: Dirigir la política de personal cualquiera que sea su régimen jurídico. Proponer al Pleno corporativo la aprobación de la plantilla y relación de puestos de trabajo..

Y el Consejo Asesor y la Asamblea como órganos estrella, de la participación, tanto en Deportes como en Cultura, se ha reunido solamente para su constitución y nombramiento de los miembros de la Junta Rectora. Eso sí, se ha reunido una vez más que con el anterior gobierno municipal. En los estatutos se dice que deben reunirse una vez al trimestre y al año, respectivamente. Son irrelevantes y como consecuencia, la tan cacareada participación ciudadana y transparencia nuevamente hurtada.

El Consejo Asesor tiene por objeto asistir a los Órganos de Gobierno y dirección

en el ejercicio de sus funciones, asesorar a la Junta Rectora en todas sus competencias, emitir informes, formular propuestas y sugerencias en todos los ámbitos de competencia del Patronato.

 Y la Asamblea constituye el órgano de máxima representación y participación de

todos los artífices de la acción deportiva o cultural local y tiene por objetivo la definición de las grandes líneas estratégicas en su planificación, así como el control y seguimiento de las acciones que desarrolle el Patronato, y sus funciones son: Proponer al Consejo Asesor proyectos y actividades culturales consensuados por los respectivos colectivos representados en la misma. Quedar informados de la gestión cultural que el Patronato lleve a cabo en cada ejercicio. Proponer sugerencias relacionadas con la gestión del Patronato. Opinar y cooperar en el buen funcionamiento de las instalaciones culturales de la ciudad.

Como podemos comprobar, en la actualidad el funcionamiento del Patronato Municipal de Cultura y el Instituto Municipal de Deportes, se ha desvirtuado y funcionan como podría hacerlo una concejalía más, con la única dirección del concejal  y de las direcciones técnicas, haciendo que los verdaderos rectores de ambos organismos, que son los colectivos vecinales, deportivos o culturales, y los representantes de los grupos políticos municipales, estén ausentes por decisión del gobierno municipal, no sabemos si por falta de capacidad o de voluntad, o de ambas cosas a la vez. Es necesario un análisis y una reflexión sobre los Patronatos.

Equo Alcázar Vecinal

 

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