La tarde del martes, 4 de junio, los cadetes de la escuela de fútbol fueron recibidos como se merece en el Salón de Plenos del Ayuntamiento. Un nuevo éxito deportivo de la ciudad que se suma a los numerosos triunfos que está viviendo el deporte alcazareño durante la temporada 2017-2018. “Estamos viviendo una edad de oro del deporte en Alcázar” –asegura la alcaldesa de la ciudad- “Es cierto que durante estos tres años no hemos parado de recibir deportistas que han destacado en diferentes ámbitos, pero este año ha sido el boom. Debemos aprender con humildad y aprovechar el tirón para que quiénes vienen por detrás tomen ejemplo y sigan por el camino del deporte”.
En el caso de la escuela de fútbol, será así, porque el legado que dejan los cadetes será recogido por sus compañeros de cantera; ya que todos ellos pasan a la categoría de juvenil y no podrán jugar en regional. “Es un equipo magnífico, se llevan bien dentro del campo y mejor fuera de él. Son una piña. Esa ha sido la clave del éxito. Su unión les ha permitido gestionar los momentos difíciles en los que todos han empujado. No podrán disfrutar del ascenso, pero también es bonito que dejen su legado a sus compañeros que ahora están en infantil”, comenta el entrenador, Luis Molina.
Los cadetes de la escuela de fútbol han conseguido ascender a la liga regional, en la que no estaban desde hace cinco temporadas. Un ascenso que no es flor de un día ya que, en este tiempo, han estado muy cerca en dos ocasiones en las que perdieron la final ante el Daimiel y el Puertollano. Parece que, a la tercera va la vencida, y en la presente temporada se han proclamado campeones, venciendo en la final al Puertollano por dos goles a cero y consiguiendo el tan deseado ascenso. “Para nosotros es un gran mérito haber conseguido para la escuela y para la ciudad lo que llevábamos cinco años intentando”, apunta Manuel Roncero Patiño, capitán del equipo, sin olvidar que la nueva categoría es muy complicada y que costará mantenerla. “El reto está ahora en mantener la categoría y no desperdiciar el primer año. No nos gustaría que el trabajo que hemos realizado no quedara para la escuela como un logro histórico”.
Seguramente serán capaces de aprovechar la oportunidad y pelear por mantenerse en regional, ya que su técnico asegura que la escuela cuenta con un gran número de jóvenes con suficiente nivel para defenderla. “Alcázar es un referente y no podíamos seguir en provincial” –apunta Molina- “tenemos por delante un nuevo reto, mantener una categoría muy difícil, con 14 equipos de los que 5 descienden y, de esos 14, en realidad compites contra 7 por mantenerte, porque el resto son de ciudades grandes como Albacete o Cuenca que es mucho más difícil que pierdan la categoría. Pero Alcázar se merece esta categoría y hay que disfrutarla y sufrirla”.
De momento, chicos, entrenadores y familiares siguen celebrando el ascenso que quisieron compartir este martes con la ciudad, en la figura de su alcaldesa. “Hemos hecho una temporada magnífica en todas las disciplinas deportivas, nos falta tiempo para poder recibirlos a todos como se merecen. Esto es una magnífica señal. La ciudad está creciendo en todos los ámbitos y no hay mejor modelo de ciudad que aquella en la que los jóvenes dedican su tiempo libre al deporte y lo hacen con éxito, trabajando en equipo, aprendiendo y poniendo en práctica el valor de la colectividad frente al individualismo, compartiendo sus éxitos”. La alcaldesa felicitó a los jóvenes cadetes que han crecido en edad, deportiva y humanamente en la escuela de fútbol de Alcázar, como asegura su entrenador, “y más aún cuando su éxito es tan generoso, dejando el legado a sus compañeros. Este es el espíritu de cantera que desde el equipo de Gobierno estamos fomentando. Jóvenes que sientan su ciudad y sus colores. Creando cantera estamos creando ciudad”.
Alcaldesa y concejal de Deportes entregaron a jugadores, equipo técnico y familiares las camisetas de #EsAlcázar como símbolo de reconocimiento y agradecimiento por parte de su localidad.
