ENCUENTROS EN LA CASTELAR

Hoy con Hugo de la Riva (cineasta, director, autor y editor)

Por Antonio Leal Giménez
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Natural de Alcázar de San Juan (Ciudad Real). Desde muy pequeño se interesó por las artes plásticas. Durante su  infancia realizó numerosos dibujos, cómics, pinturas y esculturas. Con 16 años se matriculó en la Escuela de Artes Antonio López de Tomelloso, donde amplió sus conocimientos y destrezas, aprendiendo nuevas técnicas artísticas y desarrolló la narración audiovisual. A los 20 años se tituló como Técnico Superior en Imagen en el I.E.S. Puerta Bonita (Madrid) completando así su formación como profesional de la iluminación, captación y tratamiento de la imagen. Poco después comenzó su actividad laboral como freelance realizando todo tipo de publicidad.

Talentoso, atrevido y original, ha escrito y dirigido numerosos cortometrajes de producción propia con los que ha obtenido premios y reconocimientos nacionales e internacionales. En total más de 30 premios y 100 selecciones oficiales, entre los que destaca el Short Film Corner del Festival de Cannes 2017.

Filmografía: Tarde de pesca (2017) con Miguel Rellán; Campeón (2016) con Alberto Amarilla; Blondi, el perro de Hitler (2012); El Resalto (2009); El Abducido (2008); El mejor amigo del peor asesino (2005)

Documentales y Promocionales: Homenaje 20 aniversario hospital general la Mancha Centro(2014). Vídeo que conmemora el 20 aniversario del Hospital General La Mancha Centro, en Alcázar de San Juan, con el que se homenajea a todos los profesionales que han trabajado para lograr una sanidad pública de referencia.SOY ALCÁZAR, VEN, QUIÉREME (2010) Vídeo promocional turístico de la ciudad de Alcázar de San Juan. FITUR. MARIDAJE DE SENSACIONES (2014) Vídeo de la ciudad de Alcázar de San Juan para FITUR 2014.Anuncio de la campaña de abonados del Gimnástico de Alcázar; “HAZ LATIR A TU EQUIPO” para la temporada 2013/2014.

Hugo de la Riva es un trabajador incansable que no deja nada al azar y posee una gran personalidad, demostrando continuamente en su trabajo que  tiene cualidades para triunfar en el mundo del cine, tanto por su preparación profesional como por su valía personal. Nuestra conversación, partiendo del antiguo kiosko de la Benita, va a transcurrir por todas las calles más emblemáticas de Alcázar de San Juan en busca de localizaciones.

Silencio, se rueda, claqueta, acción,...

PREGUNTA:  ¿Alguna vez dijiste la frase "Mamá, quiero ser artista". ¡Artista del celuloide!", y querías que fuera tu porvenir profesional? ¿Cómo fueron tus inicios en el cine?¿Qué otras experiencias han sido claves en tu formación como cineasta?

RESPUESTA: Bueno, nunca con esas palabras exactas pero sí recuerdo el momento cuando dije en casa que quería llegar a ser director de cine. No sorprendió demasiado, supongo que ya se sospechaba. Realmente lo decidí el primer año de bachillerato después de darme cuenta que, de alguna manera, era algo muy parecido a lo que llevaba haciendo toda la vida; inventando historias que contar a la pandilla del barrio, escondiendo mapas del tesoro que iniciasen alguna aventura... todo sin una cámara delante, claro.

P. ¿Por qué estudiar cine? ¿hay que tener vocación? ¿cuáles son las posibilidades de encontrar trabajo y cuál es el escenario actual donde se puede desarrollar un cineasta?

R. Realmente no he estudiado cine de manera formal. Me lo planteé varias veces pero suponía mucho dinero así que decidí ser autodidacta. Aprendí de los grandes directores viendo sus películas una y mil veces. También he escrito y rodado todo lo que he podido, con los recursos que he tenido a mi alcance en cada momento, haciendo de cada experiencia una lección (confieso que alguna bastante dolorosa) pero al final estoy contento con mi camino. Trabajar y vivir de dirigir es algo complicadísimo, incluso los que ya lo hacen desde hace años luchan cada día por poder continuar. Es un mundo que da poca seguridad pero cuando algo te gusta de verdad supongo que eso no importa.

P. El cine siempre ha valorado a las personas creativas, con interés por la innovación y con buena capacidad de trabajo. ¿Son esos los rasgos que comparten la gran mayoría de los profesionales del cine¿ y ¿es esa la combinación que lo ha convertido en un arte y, al mismo tiempo, en la industria central y pionera del entretenimiento?.

R. El cine nació como un entretenimiento. Una novedosa forma de contar historias apoyada en la tecnología. Esa es su esencia y así sigue siendo. Uno de escollos más grandes para el cine es la cantidad de gente necesaria en el proceso. Requiere de un gran trabajo de organización, todo ha de estar calculado, con frialdad milimétrica y aún con todo no basta con hacerlo bien, además hay que ser capaz de transmitir una emoción. Ahí está el auténtico milagro. Y cuando sucede el espectador queda  maravillado y con ganas de más.

P. Almodóvar, Amenábar, Alex de la Iglesia, Juan Antonio Bayona y muchos otros directores no son titulados en "Comunicación Audiovisual", que es la oferta de nuestras universidades. Lo mismo pasa con guionistas, montadores, directores de fotografía...más destacados. ¿Dónde estudiar cine? Dónde es mejor estudiar cine, en las Universidades Públicas o en Escuelas de cine?¿La universidad y el cine viven de espaldas? ¿la unversidad enseña a entender de cine pero no a hacer cine?

R. Existen muchas escuelas privadas magníficas en España donde estudiar cine. De ellas salen cada años cientos de grandes profesionales. Mi experiencia no me permite hablar mucho más de eso porque no ha sido mi camino. Al final lo importante es desear auténticamente algo y desearlo con todas tus fuerzas. Nunca hay un único camino para nada. A veces se da más rodeo o se tarda más en llegar, a veces está más lejos de lo que pensabas y a veces el lugar no era como te imaginabas.

P. Entrando un poco más al plano conceptual, ¿Cómo definirías el cine?, ¿cuál es tu concepción? ¿Qué ha sido y qué es el Cine?

R. Para mí el cine es que alguien que no necesitas conocer se siente delante de una pantalla y se emocione con tu historia. Es algo maravilloso. Además he tenido la suerte de que haya sucedido en culturas y países tan lejanos como la India. Compartir una idea o un sentimiento y que sea entendido por otra persona es increíble. Por eso siempre hablo del enorme potencial que tiene el cine para unirnos más allá de cualquier tipo de frontera.     

P. Resulta casi heroico ser director de cine en España y las cosas tampoco parece haber cambiado mucho desde los años 70. La actual situación del cine español ha propiciado que numerosos cineastas de nuestro país crucen el charco para seguir haciendo películas. ¿Cuál es tu pensamiento respecto a ello? ¿Cuál sería su diagnóstico sobre el cine español de los últimos años?

R. El cine español seguramente esté en su mejor momento. Es verdad que ha atravesado una época durísima de la que aún quedan muchas pulgas que sacudirse, pero sin duda el concepto y cómo es valorado ha cambiado por completo. La etiqueta de "español" ha pasado de ser una excusa para convertirse en un reclamo para el espectador. No cabe duda que aún nos encontramos lejísimos de ser un país donde el cine suponga una industria económica importante, como sucede en otros países donde hay un mercado de trabajo impresionante. Para cambiar esto se necesita más inversión, porque ideas y talento ya tenemos.

P. El cine está compuesto de varios elementos, tales como la imagen, el sonido, los diálogos, etc. ¿Consideras que hay algún elemento cinematográfico de mayor importancia, aquel que traza el perfil de la película?

R. Por encima de todas las cosas y con rotundidad, el guión. Esa es la clave y lo más difícil de conseguir. Y aún teniendo eso la cosa no está garantizada. Pero si tuviese que destacar algo más, a parte del necesario trabajo del actor (cuando no se trata de animación) es la música. La música en el cine ha sido esencial en mi vida y en mi manera de entender el séptimo arte. Pero sería engañoso si dijese que es una cuestión de elementos aislados, porque construir una película está compuesto de cientos de eslabones. 

P. Por supuesto, son tres facetas distintas pero ¿Cómo disfrutas más ejerciendo de director de  autor o  de editor? ¿Puedes decirnos la diferencia que hay entre hacer un anuncio publicitario y un cortometraje?

R. Es complicado responder porque en ambos procesos el peso creativo es determinante para el resultado final. Cuando diriges lo que haces es marcar las pautas para conseguir el material que luego usarás en montaje para dar forma al producto. Para mí es importante que vayan lo más unidas posibles, de hecho muchas veces se edita mentalmente mientras se ruedan imágenes. Las diferencias entre publicidad y cine no son muchas, de hecho hoy día se utiliza el formato cortometraje para vender (cada vez más) El objetivo final en ambos casos es transmitir una información a un espectador y si puede ser a través de una emoción, mejor que mejor. Nunca suele ser sencillo, pero cuando funciona es muy gratificante, 

P. A la hora de ponerte a dirigir, imagino que todo tipo de influencias y gustos están presentes en tu forma de hacer arte, ¿podrías decirnos algunas de tus filias y fobias en la historia del cine? Por otro lado, ¿a qué gran actor o actriz te encantaría dirigir?

R. Yo he crecido rodeado del universo creativo de Steven Spielberg. Si duda ese es mi mayor referente y el motivo por el que seguramente me haya querido dedicar a esto. Me encantan las historias donde todo es posible, donde el efecto maravilla irrumpe en la realidad para darle un nuevo significado y donde los personajes se entienden y comunican más allá del lenguaje verbal. Creo que esos elementos son un denominador común en todos los trabajos de ficción que he hecho.  En cuanto actores, creo que son demasiados para hacer una lista corta, pero por citar a algunos; Paul Newman, Audrey Hepburn, José Luis López Vazquez, Tom Hanks, Natalie Portman, Robert Shaw, Lola Herrera, Jack Lemmon, Meryl Streep, Alfredo Landa... muchos.   

P. Citizen Kane es una de las películas más importantes de la historia pues la obra maestra de Orson Welles, que la concluyó cuando aún no tenía 25 años, es un ejemplo de la técnica cinematográfica. Bardem asegura que los directores son siempre jóvenes y que el éxito suele llegar tarde en edad ¿qué reflexiones haces con dichas afirmaciones?

R. Ciudadano Kane son palabras mayores, seguramente una de las películas que más haya revisado. Orson Welles tuvo claro lo que quería y lo consiguió, con 25 años, pero podía haber sido con 50. No sabría decir si para esto es relevante la edad. Sin duda los años te ayudan a entender la vida y las dinámicas de otro modo, y la juventud para ser más imprudente y atrevido, pero al final tampoco estoy seguro de si el concepto "joven" es siempre sinónimo de bueno. El éxito es algo muy subjetivo.

P, El celuloide casi ha desaparecido porque tanto la producción de cine como la proyección en las salas se hace en formatos digitales. También las salas de cine están en declive porque muchos espectadores prefieren ver el cine en casa (42 pulgadas, FullHD, Dolby 5.1, Smart TV, internet, etc). ¿Qué va a pasar, entonces, con el Cine? ¿Va a resultar dañado por la desaparición del celuloide o por el cierre de muchas salas de proyección?.

R. Si hablamos de cine como lugar no creo que llegue desaparecer jamás. El número de salas se irá reajustando a medida que los tiempos cambien. Es verdad que la tecnología está consiguiendo que la experiencia audiovisual en casa sea cada vez más completa, pero siempre habrá algo mágico en acudir a una enorme sala a oscuras a rodearte de desconocidos para reír, asustarte o llorar. Al final somos seres sociales. Y aunque a veces compartir espacio pueda suponer alguna molestia creo que siempre valoraremos la compañía y el ritual.

P. La crisis del cine ha vuelto a estar de moda. La primera “gran crisis” del cine ocurrió en 1928, cuando el cine sonoro reemplazó al mudo y algunos vaticinaron “el final del cinematógrafo”. ¿Consideras que ni la pretendida “crisis” del cine, ni las “descargas” de internet, ni la indiferencia de los Ministros de Cultura pueden dañar una actividad que tiene una demanda constante de los medios y de la sociedad?

R. Es un tema complicado. Siempre habrá miedo a lo nuevo, por creer que amenaza nuestro hoy, pero al final todo termina encajando dentro de un enorme guión. Las crisis suelen ser momentos de incertidumbre pero lo importante es que como sociedad sepamos reaccionar. La cultura siempre ha tenido que luchar contra innumerables enemigos y el cine no lo ha tenido fácil por su carácter reivindicativo, pero siempre necesitaremos emocionarnos, con una película o con una pintura. Estamos compuestos por todo aquello que nos ha hecho sentir emociones en alguna dirección. Y eso brotará siempre por pequeña que sea la rendija.

P. ¿Crees que el cine español tiene un lenguaje propio, un lenguaje en formación o es una burda imitación de estereotipos americanos?

R. Hay cine español que imita burdamente al cine americano, pero también hay cine taiwanés que lo hace, y cine italiano, y colombiano, y noruego, y belga, y francés... incluso hay cine americano que imita burdamente al cine americano. Lo bueno o lo malo no tiene una procedencia. En España tenemos nuestras propias historias y sobre todo nuestra propia manera de entender la vida. Eso nos da un punto de vista particular y único. A menudo se habla de estilos, de fórmulas, de características... creo que lo humano es lo importante. Lo humano no tiene la exclusividad de ninguna parte.

P. Un director que solo sabe de cine, ¿es un buen director?¿ Cómo se adquiere el lenguaje cinematográfico? ¿De qué director/es aprendes cada día?

R. Responderé con otra pregunta; un carpintero que sólo sabe de carpintería ¿es un buen carpintero? Yo diría que sí. El oficio de director es un trabajo como otro cualquiera. Tiene una parte creativa vinculada, eso está claro, pero la pasión con la que te enfrentas a los retos de tu trabajo, las ganas de mejorar, de aprender, de dar lo mejor de ti con cada trabajo, es lo que creo que te hace buen o mal profesional. Ahí está la clave.

Intento aprender de todo aquello que me emociona, que atrapa mi atención o me estimula. Sin nombres concretos aunque siempre hay directores cuya obra sigo más de cerca; Por supuesto Steven Spielberg, Billy Wilder, Wes Anderson, Clint Eastwood, J.J. Abrams...

P. ¿Cuál sería tu reflexión sobre cómo aprovechar las condiciones actuales para estructurar espacios educativos de calidad para los niños y jóvenes? ¿En qué consiste tu nuevo proyecto titulado Sancho?

R. El cine debería enseñarse en colegios e institutos. Pero no de cualquier modo. Enlazando con la segunda parte de la pregunta, la gente de mi edad tiene el recuerdo de haberse visto forzada a la lectura del Quijote mucho antes de lo que seguramente sería recomendable, y eso ha producido cierto rechazo contra el que lidiamos hoy día. No se trata de que los niños o los jóvenes sepan las características del cine expresionista alemán. El cine, como la novela de Cervantes, es una manera de ver la vida, de entenderla, de enfrentarse a sentimientos y de aprender a gestionarlos. Bien enfocado cualquier disciplina artística tiene el tremendo potencial para hacer mejores personas. El proyecto de "Sancho" que estamos preparando tiene parte de eso, es una libre interpretación de los personajes cuyo tema principal gira en torno a la importancia de creer en uno mismo, por encima de cualquier miedo o condición.

P. Te propongo un ejercicio lleno de creatividad. A través de un juego de planos, la duración de las escenas, los enfoques de cámara y más, cuéntanos la sinopsis de lo que podía ser una película cuyas localizaciones sean en la calle Castelar.  Otra, en el espacio entre la Plaza y Santa Quiteria, y la última, en el Cerro de San Antón.

R. Un viajero desnortado pasea por la Castelar ante la atónita mirada de los viandantes. Viste atuendos del siglo XV y bajo el brazo lleva un enorme pergamino enrollado.

Una madre deja a su niña en el colegio Sagrada Familia y sube a su coche. En el interior se encuentra con su tatarabuela, ha vuelto de entre los muertos para pasar el día junto a ella.

En el cerro de San Antón una joven pareja disfrutan del amor bajo una estrellada noche de verano.  Un enorme platillo volante sobrevuela sus cabezas. Es el inicio de la invasión.

P. ¿Para cuándo tu primer largometraje? Alcázar de San Juan y sus vecinos, ¿son de cine? ¿ Cómo se ve detrás de un objetivo?¿Qué consejos darías a otros jóvenes alcazareños que estén pensando en estudiar cine?

Me encantaría poder rodar un largometraje pero no es sólo una cuestión de voluntad. Hace falta un buen proyecto. Estamos en el camino.

Siempre he rodado en el entorno que me rodea, en mi tierra. Sin duda es una escenario muy particular y con muchas historias que contar. Quizá el mayor problema que tengamos es no ser capaces de darnos cuenta o de valorarlo del todo, pero somos muy afortunados de vivir en La Mancha.

Dar consejos siempre es complicado y más en este mundillo. Pero si tienen pensado estudiar cine es porque les apasiona y lo viven muy intensamente. Agarrarse fuerte a esa convicción es el mejor consejo que puedo dar, que perseveren y que disfruten con lo que hacen.  

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