Artículo de Jesús Villajos Brunner

458 ediciones después...

...decido cerrar una etapa. Una época en la que he crecido en lo profesional y en lo personal. No sabía muy bien si escribir este artículo ‘en clave de despedida’ porque no creo que sea para tanto. Al fin y al cabo, como diría la canción «todo tiene su fin» y «the show must go on». Por otro lado me siento en la obligación de comparecer, sin dramatizar, ante quienes leen cada viernes, fieles desde 2009, este resumen de noticias.


    Quien me conoce sabe de mi pasión por los medios. Mis primeros ahorros los invertí en una pequeña grabadora para ir ‘narrando’ todo lo que veía: excursiones con el colegio, partidillos de barrio con los amigos o comentando las cosas que metía mi madre a la cesta de la compra... A los 9/10 años, ya acudía diariamente al kiosko «del cojo» (dicho desde el cariño), en el paseo de la estación, a comprar el Marca (mucha culpa de todo esto la tuvo José María García, Indurain y el Madrid...).


    Desde muy joven descubrí que el periodismo es una forma de vida. Hasta donde me alcanza la memoria he sentido la necesidad de comunicar, de contar cosas... sea desde el medio que fuera y como fuera.


    Todo comenzó a los 12 años, en una de esas excursiones. Grabadora en ristre, con la peña «Racimo de Oro», Victor García Chocano, que no se le escapa una, me invitó a seguir la actualidad del Juvenil del Gimnástico de Alcázar para que lo contara semanalmente en directo en el programa deportivo que presentaba en Radio Canfali (!!!). Se convertía en realidad un sueño: aprender lo que me gustaba en un medio de comunicación que aunaba la prensa y la radio. Tanto me aferré a esta oportunidad que llegado el momento de ir a la universidad, elegí, entre otras circunstancias, quedarme en Alcázar y seguir ‘creciendo desde la práctica’, hablar a través de aquellos micrófonos (¡qué poquitas radios había entonces para aprender rodeado de tantos y buenos profesionales!) y de escribir en un periódico que la gente lo leía como si fuera todo un ritual (una noticia sólo era importante si ‘salía’ en el canfali).


    En 2009, el cierre de Canfali fue un golpe severo. Tras más de 15 años aprendiendo este apasionante oficio, me ví obligado a poner punto y final a un ciclo. Me resistía a ello, aunque meses después hubo que sustituir el ‘aprender’ por el ‘emprender’ y aplicar todo lo ‘absorbido’ por las diferentes vías. Fue entonces, el 20 de noviembre de 2009, cuando vió la luz la edición 0 de El Semanal de La Mancha, un periódico comarcal creado desde el autoempleo por una sociedad laboral cuyos socios nos liamos la manta a la cabeza por culpa de ese «gusanillo» de querer seguir contando cosas, a pesar de que la inminente crisis ya anunciaba su llegada.


    Hoy, 1 de febrero de 2019, casi 10 años después, he decidido cerrar una etapa sin tener aún claro lo que empezar. De lo que si estoy convencido es lo que no quiero...


    No es nada fácil dejar así un trabajo, una estabilidad, una pasión que vives activamente desde muy joven. Se trata de un medio de comunicación que has visto nacer con esfuerzo y en el que has invertido muchísimo tiempo, mucho sudor, muchos sacrificios, lágrimas... y que un día, sin saber muy bien por qué, un «click» provoca cierta lucidez que te hace salir de un estado preso mezcla de cansancio/hartazgo, tristeza y ansiedad. Un momento de cinco segundos donde asimilas que debes poner fin motu proprio a un ciclo. Una decisión fruto de un proceso complicado y muy personal que tras ser asumida al 100%, la tormenta amaina y regresa la calma indicadora que vas por lo correcto.


    Gracias a Checa y Mercedes por todos estos años. A mi socio Victor, con 12 años fue mi mentor y durante más de 9 hemos formado parte de esto. Gracias infinitas a mis otras socias, Gema y Rosalinda, compañeras de mil y una batallas, internas y externas. Gracias por todo este tiempo, por toda esa profesionalidad que rebosáis y demostráis día tras día (en el digital) y semana tras semana (en el papel). Habéis sido capaces de «aguantarme» más de lo que esperaba... Os deseo lo mejor para dar continuidad a un medio NECESARIO.


    El Semanal de La Mancha, además de hemeroteca tangible, es una manera de dar frenazo al vertiginoso ritmo informativo que engullimos diariamente casi sin pestañear por redes y digitales. Es una forma de masticar, digerir y filtrar todo eso. Mucha fuerza y ánimos para continuar adelante con un proyecto que va camino de cumplir su X aniversario y que ha sobrevivido estoicamente a distintas crisis, tanto económicas, como las que sufre (y sigue sufriendo) el propio sector; ha aguantado a determinados «bultos» metidos en política y a ciertos pseudo-digitalillos dirigidos por pseudo-periolistillas.


    Desde hoy mismo, dejaré de estar vinculado laboralmente a El Semanal de La Mancha. Es momento de sentarse a pensar, de «hacer la digestión». Son muchas las ideas, proyectos, curiosidades que rondan por mi cabeza. Pensamientos borrosos que el tiempo y la perspectiva tornarán cristalinos. Que sea eterno todo lo que nos haga bien. ¡Hasta siempre!

Más en Opinión
Entrando en la página solicitada Saltar publicidad
Advertisement