Mereció mucho más el equipo de Raúl Espuela en su visita a Villa, en un choque, sin duda y sobre todo en la recta final, marcado por la actuación arbitral, que dejó al menos con esperanzas al equipo rojillo de poder a ver sumado algún punto.
El Pedro Muñoz salió sin especular desde el pitido inicial de Cheverrias Pérez, bien juntitos en todas sus lineas y tocando bien el balon, ante un Villa que tuvo llegadas pero sin inquietar al meta pedroteño. Los de Raúl Espuela tuvieron serias opciones de pasarse al vestuario en esta primera parte con ventaja pero no fue asi, pese a ello buena imagen la mostrada por el equipo.
Tras el descanso los primeros compases fueron de igualdad, pero en dos zarpazos el Villa, en el 65 y 67, cobró demasiada renta para los méritos que habia hecho. Pese al 2-0, el Pedro Muñoz lo siguió intentando, sin perderle la cara al partido y fue Carlos Sánchez, en el 83, el que puso el 2-1, un gol que daba esperanzas a los rojillos, quienes en la recta final tuvieron serias opciones de poder a ver sumado algo positivo
Pero ya sobre la bocina llegó el definitivo 3-1, un tanto en claro fuera de juego que el colegiado dio por valido y que supuso la expulsión del técnico Raúl Espuela, quien reconocía que el gol fue totalmente ilegal
Y así se llego al final de un encuentro donde y pese a la derrota, encajada el equipo bregó, dio la cara, en ningún momento bajó los brazos y las sensaciones que dejó en Villa fueron muy buenas, nada que reprocharle a los pupilos de Raúl Espuela que siguen mejorando partido a partido y esta es la linea de trabajo a seguir.
La proxima jornada el equipo recibe en el Juande Ramos al CD. Mota del Cuervo.
