Arte urbano para seguir embelleciendo la ciudad

Cuatro conocidos artistas del mundo graffitero han estado este fin de semana plasmando su obra en una de las paredes públicas de Alcázar de San Juan, concretamente en uno de los muros de la piscina cubierta (salida al recinto ferial), donde desde esta tarde puede contemplarse el resultado de un proyecto colaborativo, promovido por la Concejalía de Juventud: Un mural de 36 metros con el que cerrar el ciclo de decoración y embellecimiento urbano con graffitis llevado a cabo durante los últimos años en distintos lugares de la ciudad (dedicados a la Igualdad, la diversidad, el deporte, la cultura...).

En esta ocasión, con estilos y técnicas distintas, Franz Campoy, profesor y director de la Escuela de Arte

Urbano La Mancha; Rosana Colors, artista alcazareña especializada en el retrato en pintura y dibujo; Icat, muralista y escritora de graffiti con obras repartidas por todo el país de personajes femeninos de estilo cartoon; y Max 501, pionero de graffiti madrileño en la década de los 80, que incluso ha expuesto en el Museo de Arte Reina Sofía, han sido los autores, con una creatividad centrada en el cuidado y respeto al Medio Ambiente, en la que figuran animales y elementos naturales.

El objetivo es doble, tal y como ha recordado Alba Castellanos, concejala de Juventud, por un lado, seguir embelleciendo la ciudad, dando al graffiti la importancia que merece como arte urbano; y por otro lado, concienciar a la población y especialmente a los jóvenes sobre el cuidado del Medio Ambiente, recordando a la vez proyectos puestos en marcha desde el Ayuntamiento en este ámbito, como el bosque de la vida, plasmado en el mural junto a diversas figuras medioambientales, animales, plantas, florecillas, etc.

Según explicaron los propios artistas, el mural comenzó a proyectarse hace un mes aproximadamente, pero hasta el viernes no se hicieron los bocetos sobre la pared ni demás preparativos. Ayer sábado comenzó el trabajo colaborativo de los cuatro autores, cada uno con su estilo y técnica, plasmando en la pared elementos naturales y a la vez representativos de sus distintas obras, como las manos pintadas por la muralista Rosana Colors, especialista de retratos y formas humanas. Artista que, en declaraciones a la prensa, agradeció el cambio experimentado en Alcázar, donde la aceptación de los graffittis como arte urbano, no solo entre la población sino también a nivel institucional, ha evolucionado favorablemente con el paso del tiempo. "Cuando yo tenía 15 o 16 años ir al Ayuntamiento con una propuesta como ésta era impensable. Estaba prohibido pintar con spray en la calle", apuntó Rosana, quien se califica como muralista y no graffitera, "pues graffitero es quien pinta letras (rótulos) y en mi caso, prefiero el retrato o las figuras humanas".

Además de la muestra de graffiti, al finalizar la tarde tuvo lugar música en directo con Ruizz, Nerox, Gobbox y Nahu, de Alcázar de San Juan; y PBLKKS y La Ofi Records, de la localidad vecina de Herencia.