El estado de deterioro que durante los últimos años presenta la iglesia de Santa Quiteria de Alcázar de San Juan sigue siendo evidente y preocupante; aunque parece que poco a poco las gestiones que desde hace meses viene realizando la comisión técnica constituida para asesorar y ayudar a la Parroquia van dando resultados, de manera que, según ha explicado uno de sus integrantes, el arquitecto Ángel Quintanar, a elsemanaldelamancha.com, el proyecto ya cuenta con la autorización necesaria de Patrimonio y el inicio de las obras de restauración parece más cercano.
Según informa Quintanar, después de recibir la autorización de Patrimonio hace unas dos semanas, la Parroquia, a través de la comisión, ha pedido tres presupuestos a tres empresas para ejecutar la obra, una de Socuéllamos, otra de Ciudad Real y otra de Alcázar; estando en la actualidad pendiente de recibir sus ofertas y ver sus clasificaciones, "porque esta obra es singular, por la altura y por las características del edificio; y habrá que tener en cuenta no solo el factor económico, sino también otras cuestiones, como los medios que disponen, el personal, la maquinaria, etc.".
Entre esas otras cosas a tener en cuenta, sería importante que la empresa adjudicataria contase con un restaurador, pues, tal y como recuerda Quintanar, sigue siendo necesario el informe patológico previo sobre el estado del edificio. Algo que en principio iba a hacer la restauradora que visitó en febrero la iglesia, junto a los miembros de la Comisión (cuando se destapó la entrada y se retiró la malla protectora), pero que, debido a las múltiples ocupaciones y responsablidades de esta profesional, aún no ha podido ser presentado.
"Estamos pendientes de los presupuestos y del restaurador, pero ya con la vía libre por parte de Patrimonio para iniciar las obras; de manera que, en cuanto tengamos las ofertas y decidamos la empresa, nos pondremos a buscar la financiación", indica Quintanar; quien añade que, mientras tanto, otro de los miembros de la comisión, Paco Atienza, historiador municipal, está buscando posibles líneas de ayuda o subvención, para ver qué posibilidades tiene el proyecto de obtener financiación a través de determinados fondos públicos.
De todas formas, como arquitecto y en base a su experiencia y conocimientos, Quintanar considera que va 
ser imprescindible sustituir el fuste de la columna más deteriorada de la entrada al templo, afectada en casi el 50% de la piedra. Para ello, detalla, ya han localizado piedra muy similar en uno de los polígonos de Alcázar (piedra que se extrajo del suelo cuando se construyó ese polígono); aunque, por el momento, se trata solo de una posibilidad que tendrán que decidir y autorizar el restaurador y Patrimonio.
Otro tema en el que también se ha estado trabajando es el problema de las palomas. Asunto para el que la comisión también ha contactado ya con una empresa especializada que ha propuesto rebajar costes si su trabajo puede simultanearse con las obras de restauración. Una opción interesante que, según Quintanar, habrá que estudiar y tener en cuenta.
En resumen, las obras de restauración de Santa Quiteria parecen estar más cerca. Las gestiones están resultando complicadas y más lentas de lo esperado, pero poco a poco siguen dando sus frutos, pendientes actualmente de los presupuestos u ofertas económicas de tres empresas y del informe de restauración; pero ya con la luz verde de Patrimonio.
