Corridón de toros en Alcázar, donde se han cortado once orejas y un rabo

Feria Taurina con motivo de las fiestas de Alcázar, con tarde calurosa y tres cuartos de entrada.

   Se lidiaron toros del El Torero (Cádiz), bien presentados y de buen juego en general; y un novillo de Juan Pedro Domecq que también se unió a la fiesta.

   Los cuatro toreros salieron a hombros, los intervinientes fueron:

- Morante de la Puebla, 3 orejas.

- Emilio de Justo, que también cortó 3 apéndices. 

- Ángel Téllez, 3 orejas y rabo.

- Novillero local, Aarón infantes, le cortó dos orejas a su novillo

De excepcional podemos calificar la corrida de esta tarde en el coso de Alcázar, donde tanto los toros de El Torero como los actuantes han estado inconmensurables. El festejo, muy brillante; y los aficionados que han asistido han salido toreando de la plaza. Hacía tiempo que no veíamos una corrida tan completa y tan buena. Ha habido hasta un indulto, el sexto de la tarde, una vuelta al ruedo al quinto; y con un cuarto que también ha sido toro de vuelta.

Los toreros, Juan Morante de la Puebla, extraordinario, en su línea , toreando muy, muy despacio y con esa clase que solo él tiene. Con dos faenas cuajadas y primorosas, tanto con el capote, mecido excepcionalmente, como con la muleta, con la que ha puesto los pelos de punta al respetable.

Emilio de Justo, muy bien el extremeño; y aunque algo mermado todavía del percance de Madrid, ha practicado ese toreo lleno de temple, torería y sabiduría, haciéndolo todo despacio y con mucha clase. Los tendidos gritaron varias veces lo de “torero”, “torero”, transmitiendo ese regusto que solo tienen los elegidos.

Ángel Téllez, debutante en esta plaza. El torero de Mora de Toledo ha llenado las expectativas con un toreo al natural excepcional. Indultó al sexto de la tarde y estuvo brillante con sus dos oponentes, de una manera extraordinaria. Temple de sobra; y sobre todo, de un toreo al natural de muchos quilates. No nos extraña que haya sido en esta temporada el triunfador de San Isidro. Hoy en Alcázar, lo ha demostrado con creces.

Aarón Infantes. Tenía en su pueblo una papeleta que no era fácil y la ha sabido solventar con matrícula, compartir cartel con tres figurones del torero es difícil y complicado, pero Aarón ha hecho lo que hay que hacer en estos casos, echándole casta y confianza en sus posibilidades. Empezó algo nervioso, cosa normal, recibiendo un revolcón fuerte del que se sobrepuso enseguida; y después estuvo sobrado, toreando muy templado y con calidad, cosa que los tendidos agradecieron con fuertes aplausos. Muy bien, Aarón, que parece que lleva en esto toda la vida; y hoy en su pueblo ha demostrado que puede conseguir en el toro muchas más cosas. Estocada hasta los gavilanes, cortando las dos orejas a un fuerte novillo de Juan Pedro Domecq.

RESUMEN

Corrida de las que quedan para el recuerdo, donde los matadores han cuajado una buenísima actuación, llena de toreo del que no nos olvidaremos fácilmente. Los toros, embistieron todos, con clase y recorrido, facilitando la actuación de los matadores. Las espadas también funcionaron de una manera inusual y eso hizo que se cortaran 11 orejas y un rabo.

La gente ha disfrutardo de lo lindo, entre los que nos incluimos. Con estos festejos hay toros para rato.

FOTOS IVÁN RODRÍGUEZ