Dos hermanos alcazareños, Rosa y Andrés, evitan un suicidio

Los hechos ocurrieron el domingo 5 y agradecen la rápida intervención de la Policía Nacional. Fueron los locales quienes echaron la puerta abajo y encontraron a la mujer tirada en el suelo

Rosa y Andrés Quintanar, dos hermanos de Alcázar de San Juan, protagonizaron el pasado domingo una conmovedora historia al evitar el trágico desenlace en el que pudo acabar una amiga, quien el mismo domingo intentó quitarse la vida, afortunadamente sin éxito, según relatan a www.elsemanaldelamancha.com, y gracias a la rápida intervención de la Policía Nacional.

Todo comenzó el pasado viernes 3 de junio, cuando la amiga de Rosa y Andrés se encontraba de mudanza para cambiar de vivienda y pidió ayuda para trasladar los enseres, algo que Rosa hizo con gustó el viernes y que pensaban continuar el domingo por la mañana.

Llegado el domingo, según cuenta Rosa a elsemanaldelamancha.com, a lo largo de la mañana, la amiga no contestaba al teléfono ni daba señales de vida, a pesar de que habían quedado para continuar la mudanza. “Entonces no le di importancia…Preparé la comida normalmente, para que se viniera a mi casa; y decidí llamarla más tarde… Pero entonces me llamó por teléfono otra amiga común que vive fuera de Alcázar, alarmada porque en el estado de una red social nuestra amiga común había puesto cosas muy raras, dando gracias y pidiendo perdón, como si fuera una triste despedida… No nos pareció normal; y fue cuando mi hermano y yo nos pusimos en alerta y fuimos hasta su casa”.

Así comenzó un periplo de casa en casa, ya que al ver que no abría la puerta ni contestaba al teléfono, decidieron buscarla en la nueva vivienda donde se iba a mudar, pero aparentemente tampoco estaba allí.

Tras varios intentos y ya alarmados, acudieron a la Policía Local para ver si podían personarse en la casa, “mientras nosotros volvíamos a su casa”. “Llamamos también a la Policía Nacional que llegó en menos de dos minutos”, explican. Minutos que resultaron cruciales para salvarle la vida, pues, tras intentar localizar al propietario de la vivienda para que abriese la puerta, la Policía tuvo que tirarla abajo para entrar, “porque el cerrojo estaba a medias y no se podía abrir”.

Finalmente, fue la Policía Local quien tiró la puerta, con permiso de la propietaria y accedió a la vivienda, donde encontró a la mujer tirada inconsciente, con varias cajas de pastillas esparcidas a su alrededor. Tras comprobar que seguía con vida, colocaron a la mujer en posición de seguridad, ventilaron la habitación y avisaron a los servicios de Emergencia, para llevar al hospital a la Mujer, quien afortunadamente pudo salvar su vida.

Rosa y Andrés no quieren protagonismo e incluso se ruborizan al saber que su historia va a ser contada en los medios de comunicación. Agradecidos, han escrito una carta a la Policía Nacional, pues consideran, desde la humildad, que la rápida intervención de los agentes fue verdaderamente lo que salvó la vida a su amiga.

Rapidez que no hubiera sido tal sin la perseverancia de estos dos hermanos, ángeles de la guarda cuya actuación bien merece la pena reconocer y compartir con la opinión pública. Enhorabuena a estos dos alcazareños y ojalá cunda el ejemplo.