El agua de la piscina cubierta de Alcázar de San Juan ha vuelto a su temperatura habitual (30º el vaso pequño y 28º la grande) tras haber pasado por varias fases desde el pasado mes de octubre, cuando se acordó bajar dos grados la temperatura, atendiendo a las medidas recomendadas desde Europa para ahorrar energía (28º el vaso pequeño y 26º el grande). Pero posteriormente, tras las quejas de algunos usuarios, se subió un grado, quedando entonces el agua a 29º en la piscina pequeña y 27º en la grande), tal como ha informado a elsemanaldelamancha.com el concejal de Deportes y presidente del IMD, Javier Ortega.
Aún así, a día de hoy, lunes 5 de diciembre, desde los servicios técnicos del IMD se ha decidido subir de nuevo el grado que se había bajado, con lo que la temperatura del agua, foco de varias quejas y escritos al ayuntamiento, vuelve a estar como en años anteriores, es decir, el vaso grande a 28 grados y el vaso pequeño a 30 grados. Tal decisión se ha tomado principalmente porque en el exterior de la piscina hace ya el frío propio de invierno y el contraste entre dentro y fuera de las instalaciones es más pronunciado ahora que al inicio de temporada.
QUEJAS POR BAJA TEMPERATURA
La temperatura del agua de la piscina cubierta lleva varios meses generando cierto conflicto, ya que a este periódico han llegado quejas
sobre este asunto. Un tema que puede parecer que no tiene importancia, pero que ha producido malestar y descontento entre algunas vecinas, para quienes el agua estaba excesivamente fría.
De hecho, Luisa Ramos González, una pensionista de Alcázar de San Juan, tras haber reclamado y presentado varias quejas en el ayuntamiento, se personó en El Semanal para dar su opinión sobre la temperatura del agua, "que está muy, muy fría", por lo que, según explica, dejó de acudir a la piscina hace dos semanas, a pesar de haber pagado 19,70 euros por el mes.
Preguntado por este asunto el concejal de Deportes, Ortega ha informado que es cierto que al principio del curso, por la subida del precio del gas y las medidas de eficiencia energética, se acordó bajar dos grados cada vaso, algo que se rectificó al poco, puesto que los usuarios se quejaron de que el agua estaba fría. Tras estas quejas se acordó subir un grado, dejando el vaso grande a 27 grados y el pequeños a 29.
Desde que esto ocurriera, han sido tres las reclamaciones y quejas que han llegado al IMD, tal como ha comprobado este medio de comunicación en sus instalaciones, de un total de 800 usuarios en los cursos y unos 2.000 al mes, también incluyendo el baño libre. Es decir, de casi 3.000 usuarios apenas 3 se habían quejado.
No obstante, la bajada de las temperaturas en las últimas semanas y el frío que hace en el exterior de la piscina han llevado al IMD a mantener los grados del agua habituales en otras temporadas, es decir, 30 en el vaso pequeño y 28 en el grande.
