La Asamblea 7N de Alcázar ha desarrollado este miércoles un acto de protesta y lucha contra la violencia machista en la víspera del Día Internacional de la Eliminación de la Violencia hacia la Mujer, y lo ha hecho junto al colectivo gitano en una tarde en la que la lluvia no ha impedido su desarrollo.
Según ha destacado la técnico del programa por la Igualad de Secretariado Gitano, Sandra Montoya, “a pesa de ser un día triste y de ser un día en el que lloramos por las que no están, decir que nos sentimos contentas y alegres por seguir reivindicando, y además es muy importante que la mujer gitana sea visibilizada y participe en actos y en eventos como éste”.
Y es que, según Montoya, “sufrimos violencia, la misma que sufre cualquier mujer por el hecho de ser mujer, pero además, a la mujer gitana se le añade una discriminación doble, por ser mujer y además pertenecer as los uno de los colectivos más discriminados”, y ha añadido que “es una lucha que llevamos a cuestas, y aunque hemos conquistado varias áreas, aún nos queda mucho terreno por conquistar, y en esa lucha, una gran ayuda y promotor de la misma es el Programa Calí que está implantado en la Pradera, cuyas participantes han sido las que han decidido movilizarse y participar para reivindicar actos como este, nos ha sido muy fácil contar con ellas porque estamos en un nivel de empoderamiento en el que la mujer gitana es protagonista de su propio camino y su propio feminismo”.
Por su parte, Rosa Zafra, de la asamblea feminista 7N, ha explicado que hay que continuar con estas reivindicaciones porque son las mismas razones, los mismos dolores y las mismas tristezas, “seguimos igual, esto no cambia, la pandemia fue terrible, estamos saliendo de ella y la cosa sigue exactamente igual, violaciones en grupo, maltrato psicológico, físico, asesinatos, maltrato mediático… no cesa”.
En el acto, además de la concentración se ha leído un manifiesto conjunto de la asamblea 7N y el Secretgariado Gitano, performances dolorosa en la que se ha querido recordar a todas esas mujeres que ya no están y han lanzado “mensajes positivos de sueños que tenemos como mujeres gitanas, porque nos une a todas la igualdad y pedimos violencia cero y poder alcanzar una igualdad real y equitativa”, según ha señalado Montoya.
