El talento de Jops y la identidad alcazareña, en las paredes del silo
El diseño urbano que el grafitero Jops, Javier López, está realizando en una de las paredes del antiguo silo de
La visita ha sido realizada por la alcaldesa, Rosa Melchor y el concejal de Agricultura, Benjamín Gallego, quienes han querido comprobar sobre el terreno cómo van los trabajos de pintura y diseño que este joven alcazareño lleva varios días realizando, subido en una gran grúa y desafiando no solo las alturas (25 metros) sino también las altas temperaturas de este mes de mayo.
Melchor ha detallado que el gran dibujo del Quijote que ya puede apreciarse desde lejos, responde a una primera fase del proyecto, propuesto por el propio Jops al Ayuntamiento. En esta fase, financiada con 12.000 euros desde el propio Ayuntamiento, quedará embellecida la pared que más se observa cuando se viaja en tren al pasar por Alcázar de San Juan; para más adelante, en función de la disponibilidad presupuestaria, ir completando el diseño hasta alcanzar las cuatro caras o paredes del silo.
Melchor ha agradecido a Jops la iniciativa y ha recordado su empeño y el del Equipo de Gobierno en hacer que "todos los alcazareños sean profetas en su tierra", de forma que el talento de los vecinos beneficie a la propia ciudad, en este caso embelleciendo espacios urbanos tan singulares como el silo, donde también se ha recuperado una nave para la asociación de canaricultores y otra para la Banda de Música.
Los grafitis de Javier López, JOPS, son muy conocidos en Alcázar de San Juan, donde ya ha embellecido otros espacios urbanos como el auditorio del Parque Cervantes o la nave de los canaricultores ya mencionada. Su primer grafiti fue el león de colores de la calle Tomás Tapia, plasmado en el bajo de un bloque de pisos.
En el caso del silo, el dibujo se extenderá por los cuatro muros, de forma que cuando esté completado podrán observarse diversos personajes, unidos por la continuidad del azul del cielo manchego y el marrón de la tierra: el Quijote, Sancho y dos personajes reales extraídos del grupo de lucha medieval de Woku. La cara que se ve desde el parque Cervantes será un molino de viento como imagen insignia de La Mancha, según ha detallado el artista, quien, contestando a preguntas de El Semanal, ha asegurado que "se puede vivir de esto, aunque no es fácil".
Añadir que, según las previsiones de Jops, esta primera fase estará concluída en unos seis días.