Fallece nuestra colaboradora Delirio Quiralte

Con pésame y dolor, despedimos a nuestra colaboradora Delirio Quiralte Romero, fallecida hoy en Alcázar de San Juan. Atrás quedan multitud de textos, relatos, poemas, colaboraciones entrañables, sobre la vida misma, sobre la naturaleza, sobre su pueblo y sus gentes...Y especialmente sobre su hermano, Francisco Quiralte Romero, maestro, abogado y escritor, fallecido también en los años 90.

    Viuda de Juan Tejera, Delirio recibirá mañana el último adiós de familiares y amigos en una misa prevista a partir de las 10 horas en Santa Quiteria, para posteriormente ser incinerada en el crematorio de Alcázar de San Juan.

    Vaya nuestro reconocimiento y agradecimiento sincero para Delirio, escritora y poeta. Una mujer luchadora, comprometida, defensora a ultranza de los suyos. Una alcazareña que luchó incansablemente para restituir el honor de su hermano, encarcelado con tan solo 14 años por razones políticas o ideológicas. Causa que quedó reflejada y así consta en la Declaración de Reparación y Reconocimiento Personal que el ministro de Justicia firmó en 2012 gracias al tesón de Delirio, empeñada en dejar claro que su hermano no estuvo en la cárcel por ser un delincuente, sino por todo lo contrario llegando a ser un gran jurista, docente y creador literario.

    En carpeta, inédito, quedó este poema (nos lo trajo escrito a máquina, como siempre hacía, en marzo de 2020, justo antes de que empezase la pandemia). DESCANSE EN PAZ.

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Por Deliro Quiralte

Volver a quererte

con el pelo de plata.

Volver a quererte con el

alma machacada por las penas.

Volver a encontrarte

con pasos inseguros y

manos temblorosas.

Ver de nuevo tus ojos

cuando la vida se

ha pasado.

Volver a quererte

cuando el fin del

camino puede ser cada día.

Volver de nuevo a

ver dibujarse nuestras

sombras en las paredes.

Andar despacio por

los atardeceres, hasta

perderse el sol.

Cuando no exista porvenir,

ni música, ni canciones,

cuando en el cielo, haya

solo nubes oscuras.

Volverte a querer

cuando no te importe

ni el tiempo ni el espacio.

Descubrir, aunque tarde,

lo importante de la vida.

Volver agarrar en el aire

los trozos que dejamos irse

de felicidad.

Ir de tu mano por los

sueños, hasta perdernos

en la infinidad.