Ayer mantuvieron una reunión en la Alcaldía para acercar posturas

Hosteleros y Gobierno de Alcázar deciden que la subida de la tasa de terrazas sea paulatina

Después de varias reuniones y del malestar que la subida de la tasa de terrazas, («exagerada y desproporcionada», según ASECEM) ha provocado entre los hosteleros de Alcázar de San Juan, ayer jueves tuvo lugar un nuevo encuentro en la Alcaldía «para acercar posturas y estudiar la mejor fórmula de aplicar dicha subida, aprobada por el Pleno en noviembre».
    

Después de la reunión, el hostelero Víctor García Chocano, en representación del colectivo «La Sonrisa del Quijote» valoró positivamente la actitud de la alcaldesa, Rosa Melchor y del Equipo de Gobierno, «pues ha sabido rectificar, recoger las inquietudes del sector y estudiar los planteamientos y quejas que le hemos presentado, aceptando que los hosteleros con terrazas hagan frente a la subida de la tasa de manera paulatina durante los próximos 3 años». Es decir, la subida prevista en 2020 se distribuirá entre este año, 2021 y 2022, de manera que en 2022 quede completada.
    

Para establecer las nuevas tasas se han tenido en cuenta dos criterios. Por un lado, el lugar en el que se encuentra el establecimiento (con mayor o menor afluencia de público) y, por otro, el tipo de terraza. En cuanto al lugar de ubicación, se han definido dos zonas: La Zona A, centro de la ciudad y calles más concurridas; y la Zona B, el resto. Igualmente, se han establecido tres categorías de terrazas: veladores (terrazas abiertas con sombrillas que ocupan la vía pública durante unas horas determinadas al día) marquesinas (estructuras abiertas ancladas al suelo, disponibles durante todo el año) y cerramientos (que constituyen un local en vía pública). Lo que se traduce en que pagarán más los hosteleros con terrazas mejor ubicadas, con más metros cuadrados y cerramientos.
    

Según el acuerdo adoptado en la reunión de ayer, el ejemplo más caro y con la subida más alta sería el de una terraza situada en la zona A, instalada durante todo el año y con cerramiento. Para este caso, el precio del metro cuadrado que el titular ha venido pagando desde 2016 hasta 2019 era de 24,70 euros; y con la subida aprobada iba a ser de 68,68 euros. Pues bien, con el nuevo acuerdo, en 2020 deberá abonar el metro cuadrado a 39,36 euros, en 2021 a 54,02 euros por metros cuadrado; y finalmente, en 2022 los 68,68 euros por m2. Igualmente, en el caso más barato, es decir una terraza situada en la zona B sólo durante el verano y con veladores, los 15,58 euros por metro cuadrado que ha venido pagando desde 2016 hasta 2019 se han convertido, con la subida, en 17,66 euros por metro cuadrado, acordándose que en 2020 el metro se cobrará a 16,27 euros; en 2012, 16,96 euros por metro cuadrado y finalmente en 2022, 17,66 euros/m2.
    

Respecto al incremento, la alcaldesa, Rosa Melchor, ha explicado en reiteradas ocasiones que esta tasa llevaba sin subir varios años y era preciso actualizarla para adecuarla a los precios que se pagan en ciudades de similar tamaño al de Alcázar de San Juan, como Valdepeñas, así como al nivel de los servicios públicos que presta el Ayuntamiento. «Desde el gobierno entendemos que quienes hacen un uso privativo del suelo público, que es del pueblo, han de contribuir de manera justa», apuntan desde el Ayuntamiento, insistiendo que para el ajuste de las nuevas tasas se han tomado como referencia las existentes en otros municipios próximos, además de los costes derivados del mantenimiento, alumbrado, arreglo de aceras, pavimento de calles, seguridad (policía/bomberos) o limpieza viaria, de los que estos establecimientos también se benefician. «Como contrapartida, desde el Ayuntamiento colaboramos activamente con el sector hostelero a través del plan de dinamización de la ciudad.Todas las semanas hay algún evento deportivo, cultural, festivo, gastronómico… que repercute positivamente sobre el sector hostelero».
    

En cuanto a la postura de ASECEM, muy descontenta con la subida y molesta después de la reunión del martes en la que no se llegó a ningún acuerdo, sus responsables hablaron incluso de no instalar las terrazas como medida de protesta. Algo que previsiblemente no se hará realidad al haberse aceptado la distribución de la subida de la tasa en varios ejercicios (este año 2020, 2021 y 2022).