ARTÍCULO DE IZQUIERDA UNIDA ALCÁZAR DE SAN JUAN

Socialismo es defender la gestión directa de los servicios públicos esenciales

En el pleno ordinario del Ayuntamiento de Alcázar celebrado el martes 26 de mayo, el Partido Socialista, con el apoyo de Partido Popular, Ciudadanos y Vox, ha aprobado el inicio del expediente de contratación del servicio de “Ayuda a Domicilio”, servicio que presta en la actualidad la empresa privada SANIVIDA, cuyo contrato finalizó el 23 de mayo de 2020, si bien dicho contrato fue prorrogado, en el mismo pleno, hasta que se resuelva el nuevo procedimiento de licitación, con el voto a favor de todos los grupos políticos, incluido el de Izquierda Unida, pues era imprescindible que, en el contexto de crisis sanitaria y económica provocado por la pandemia, la prestación del servicio se debe mantener y, en su caso, incrementar a nuevos usuarios.

En virtud del Convenio 2017-2022 suscrito por el Ayuntamiento de Alcázar con la Consejería de Bienestar Social de la Junta de Comunidades de Castilla La Mancha, la organización del Servicio de Ayuda a Domicilio es competencia de la Corporación Local, que podrá gestionarlo de forma directa o indirecta, correspondiéndole las funciones de coordinación, seguimiento, supervisión y evaluación del servicio, sin prejuicio de las funciones de evaluación y seguimiento atribuidas a la Consejería.

Como es de sobra conocido, Izquierda Unida viene manteniendo que la gestión directa de los servicios públicos esenciales, entre los que incluimos la Ayuda a Domicilio, es más barata y eficiente que la gestión privada. Esta misma opinión es sostenida por el Tribunal de Cuentas, órgano que no creemos que pueda ser calificado de comunista …

Los distintos sindicatos de clase vienen denunciando la creciente mercantilización que sufre el servicio de cuidado a las personas mayores dependientes en España y cómo este “negocio” empobrece cada día más a las mujeres que trabajan haciendo efectivo el derecho a la Ayuda a Domicilio, quienes se encuentran en una situación laboral indigna, caracterizada por los bajos salarios, por la falta de reconocimiento y de abono como tiempo efectivo de trabajo tanto de la media hora de descanso como del tiempo que emplean para desplazarse entre servicio y servicio; por la deficiente programación de servicios a realizar, pues éstos finalizan y comienzan a la misma hora, con el consiguiente perjuicio de las personas usuarias a las que se les resta tiempo. Las trabajadoras de la empresa que presta el servicio de Ayuda a Domicilio en Alcázar sufren las mismas condiciones de precariedad laboral que las del resto del país.

Por otro lado, la pandemia del COVID-19 ha puesto de manifiesto la pésima gestión de las residencias de mayores en manos de empresas privadas, con las nefastas consecuencias para los usuarios y las usuarias de las mismas.

El informe elaborado por los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Alcázar para el inicio de este expediente de contratación de la Ayuda a Domicilio dice que no cuentan con los recursos humanos y materiales necesarios para el desarrollo de dicho servicio en condiciones óptimas de calidad, por lo que se hace del todo necesaria la contratación de servicios y recursos externos a la plantilla habitual de los Servicios Sociales Municipales.

Es realmente sorprendente que unos Servicios Sociales tan premiados y distinguidos por su excelencia como los del Ayuntamiento de Alcázar carezcan de los medios materiales y humanos para gestionar de modo directo un servicio público tan esencial como la Ayuda a Domicilio.

En cualquier caso, la gestión directa de este servicio por parte del Ayuntamiento sólo requeriría la contratación del personal especializado necesario para ejecutarlo, y una mínima inversión en elementos materiales. En este sentido, el equipo de gobierno no ha elaborado un informe económico que acredite que la remunicipalización de este servicio sea inviable. Por el contrario, en Izquierda Unida pensamos que la gestión directa del servicio es posible y que, con el presupuesto base de licitación del presente expediente, que alcanza los tres millones de euros, el Ayuntamiento tendría crédito suficiente para abonar el salario de las trabajadoras contratadas para prestar el servicio y para pagar la inversión en los medios materiales necesarios para su perfecta ejecución, garantizando así una óptima calidad para las personas dependientes usuarias del servicio y unas condiciones laborales dignas para las trabajadoras que prestan el servicio.

En definitiva, sólo se necesita voluntad política para remunicipalizar el servicio, voluntad de la que carece el Partido Socialista de Alcázar, ferviente partidario de la colaboración público-privada, como lo acredita el hecho de que tiene externalizada la gestión de la mayoría de los servicios esenciales (limpieza viaria y de edificios públicos, ayuda a domicilio, etc.),  lo que favorece que las empresas privadas que gestionan tales servicios obtengan el correspondiente lucro, siempre a costa de la precariedad laboral de los trabajadores y de la bajada de la calidad en la prestación de los servicios. Si eso es socialismo, que el dios de García-Page baje y lo vea …

Coordinadora Local de Izquierda Unida de Alcázar.