Los criptanenses Ángel Sepúlveda Beamud y Marino Sánchez Ortiz, víctimas del exterminio nazi, primeros homenajeados del proyecto "Stolspersteine"

Ángel Sepúlveda Beamud y Marino Sánchez Ortiz, asesinados en el campo de concentración de Mauthausen entre 1941 y 1942, han sido los dos primeros nombres rescatados del olvido en la provincia de Ciudad Real, dentro del proyecto europeo ‘Stolspersteine’, al que se ha sumado la Diputación de Ciudad Real.

Campo de Criptana ha sido esta mañana la primera localidad de la provincia de Ciudad Real donde se ha rendido homenaje a las víctimas del exterminio nazi, dentro del proyecto internacional denominado "Stolperstein", a través de la iniciativa "Mapas de la Memoria" de la Diputación. Un proyecto que consiste en rescatar del olvido, recuperar la memoria y restituir el honor y dignidad de aquellos ciudadrealeños que fueron represaliados, torturados y en muchos casos asesinados en el campo de concentración de Mauthaussen, en Austria.

El homenaje ha tenido lugar en la calle Ramón y Cajal y en la plaza Pozo Hondo, delante de las viviendas donde

residieron Ángel Sepúlveda Beamud y Marino Sánchez Ortiz, en cuyas aceras se han colocado sendos adoquines conmemorativos (también mañana en Arenales de San Gregorio, antigua pedanía de Campo de Criptana, para homenajear a Wenceslao Fernández). En total, según han explicado los responsables de la iniciativa, se colocarán más de 75.000 adoquines en más de 20 países, conformando entre todos el monumento más grande del mundo en homenaje a las víctimas del terror nazi y en el marco del día en Memoria de las Víctimas del Holocausto que Naciones Unidas celebra cada 27 de enero.

El presidente de la Diputación, José Manuel Caballero; los diputados provinciales David Triguero y Mariano

Ucendo; y el senador socialista José Manuel Bolaños, han querido acompañar en el acto a los familiares de estos dos criptanenses, así como a las autoridades locales, con el alcalde Santiago Lázaro en cabeza, quien ha destacado la sensibilidad especial de este evento y ha agradecido a Diputación, Universidad de CLM y UNED el trabajo realizado para sacar del ostracismo a los criptanenses y ciudadrealeños que fueron torturados y asesinados en campos de concentración nazis, exiliados de España después de la Guerra Civil, por defender valores como la libertad, la justicia y la democracia de los que disfruta la sociedad actual. "Trabajo que nos acerca la Historia a nuestras vidas diarias y nos permite mostrar a las generaciones más jóvenes cómo algunos paisanos se dejaron la vida para que hoy otros vivamos con justicia y libertad".

Caballero también ha querido subrayar los valores de todas las víctimas, 150 en la provincia, de las que 104

fueron asesinadas, según ha referido. "Personas que tenían ilusiones de vida y valores truncados de forma trágica. Ciudarealeños a los que tenemos la obligación institucional de rendir homenaje, para que todo el mundo sepa y conozca que el exterminio nazi alcanzó a gentes de todo el mundo. En nuestra provincia 150 valientes, que tuvieron el valor y la gallardía de seguir luchando después de la Guerra civil, alistándose en el ejército francés para defender unos principios que hoy nos permiten vivir en paz y en democracia". Obligación "impuesta por Naciones Unidas en el mismo día, el 27 de enero, que se liberó el campo de concentración de Auswitch; y en nuestro caso gracias al Mapa de la Memoria y al trabajo concienzudo, riguroso y profesional de los investigadores que están llevando a cabo el proyecto".

Obligación también ética y moral para restituir la memoria de estos ciudadrealeños, "porque nadie muere del todo mientras se le recuerda", ha dicho el presidente de la Diputación, calificando el homenaje como un acto de justicia y reconocimientotambién a los familiares, a quienes ha pedido que se sientan orgullosos de sus orígenes y no oculten el parentesco con estos valientes. Y obligación también de hacer pedagogía para que nunca vuelvan a ocurrir hechos semejantes, "reafirmando al mismo tiempo nuestro compromiso de respetar a quienes piensan de forma diferente". "En resumen, un día triste, porque supone recordar hechos durísimos; pero también un día de alegría porque como sociedad hoy reconocemos a quienes lucharon y dieron su vida por la justicia y la libertad", ha concluído.

En el acto también han intervenido los investigadores de la UNED Jorge Moreno y Alfonso Villalta, quienes han agradecido a la Diputación y a los alcaldes de Campo de Criptana, Arenales de San Gregorio, Miguelturra, Alcázar de San Juan y Manzanares la colaboración prestada; así como a los criptanenses Fernando José García y José Vicente Méndez su ayuda a nivel local, fundamental para localizar las casas exactas donde vivieron los homenajeados. También al grupo de investigadores de Mapas de la Memoria y a los familiares por dar sentido a la iniciativa.

Finalmente, en nombre de los familiares, ha dirigido unas palabras a los presentes Santiago Diaz Hellín, nieto de Ángel Sepúlveda, quien ha relatado cómo su abuelo tuvo que exiliarse tras la victoria franquista, dejando en Campo de Criptana a una mujer embarazada y cinco hijos que nunca volvió a ver. Para él, este homenaje ha sido como volver a tener a su abuelo en casa, ahora enterrado junto a la casa donde vivió en su pueblo natal y con los suyos.
 
Tras las intervenciones, el propio nieto ha colocado el adoquín con el nombre y datos de su abuelo en la acera,  junto al número 6 de la calle Ramón y Cajal, por donde han ido pasando otros familiares y vecinos presentes para depositar claveles rojos y una vela encendida como recuerdo, a modo de despedida.