Errores y aciertos al querer pasar la ITV

Si conduces un vehículo como un coche, una moto, incluso una autocaravana, entre otros, seguramente ya sabes que cada cierto tiempo debes pasar la ITV, en pro de la seguridad de todos.

No obstante, lo que probablemente no sepas es sobre los errores exactos que se cometen y cuestan repetir el proceso, y los aciertos que te acercan más a pasarla, pues es el objetivo central.

Pasar la ITV: indispensable para conducir legalmente

Pasar la ITV es principalmente un requisito legal, y hacerlo es fundamental porque conducir sin la misma vigente, puede acarrear multas, pérdida de puntos en el carnet e incluso la inmovilización del vehículo en casos graves.

Además, circular con un medio que no está en condiciones óptimas pone en riesgo la vida de sus ocupantes y la de los demás en la carretera. Es por eso que la misma se convierte en una medida preventiva para detectar y solucionar problemas mecánicos, antes de que se conviertan en un peligro mayor que cueste caro.

Errores que cuestan la ITV

Aunque muchas veces confiamos en que nuestro vehículo está en buen estado, existen varios errores que pueden hacer que no apruebes la ITV:

-Neumáticos desgastados o mal inflados. Al ser de los primeros factores que se miran, si están por debajo del límite legal de profundidad o mal inflados, es al mismo tiempo de las razones que generan rechazo inmediato.

-Luces que están defectuosas. Tanto las luces de posición, como las de freno, intermitentes y luces largas deben funcionar correctamente. Un fallo en alguna de ellas es motivo de rechazo inmediato.

-Frenos en mal estado. Debido al papel que tienen los frenos en la conducción, es entendible porque si se encuentran en mal estado, no se pase y deba repetirse.

-Fugas de aceite o líquidos. Las fugas visibles de aceite, refrigerante o cualquier otro fluido del motor son un fallo grave y causarán la suspensión para que arregles esto.

-Problemas en la suspensión. Si los amortiguadores no funcionan correctamente o presentan fugas, el vehículo no superará la inspección.

-Documentación incompleta. No contar con la documentación necesaria o presentar papeles caducados también puede evitar que tu vehículo sea inspeccionado correctamente.

-Espejos retrovisores rotos o deteriorados. Por más que se crea que es una pequeñez, al menos los inspectores de este proceso, lo verán como algo grande si tienen roturas o no son funcionales en el nivel que deben.

-Cinturones de seguridad defectuosos. Si alguno está roto o no se ajusta bien, estamos hablando de un fallo no nada más de cara a la ITV, igualmente de tu integridad y de los pasajeros en general del coche.

-Desajuste en los limpiaparabrisas. Si las escobillas no barren correctamente o están desgastadas, se considera una falta, especialmente si las condiciones climáticas son adversas.

-Placas de matrícula ilegibles. Las matriculas tienes que ser legibles, y para ello, deben estar limpias, siendo que ir con suciedad en las mismas, es una mala práctica.

-Alineación incorrecta. Si las ruedas están desalineadas, afectará la conducción y se considerará un defecto importante.

Aciertos para pasar a la primera

Para evitarte problemas y no tener que repetir la inspección, al menos idealmente, los siguientes puntos son útiles para pasar a la primera:

-Revisar los neumáticos antes. Al ser de los primeras comprobaciones que se hacen, adelántate u verifica, incluso dos veces, que todo está bien con lo que respecta a estos.  

-Comprobar todas las luces. Haz una revisión previa por tu cuenta de cada una de las luces del medio y cambia las bombillas que no funcionen antes de la inspección.

-Reparar cualquier fuga visible. Si detectas una fuga de aceite o cualquier otro fluido, no esperes a última hora. Llévalo con los que saben cómo con IMD-Ingeniería para que lo reparen.

-Realizar un mantenimiento regular. Un coche, moto, etc., que recibe mantenimientos regulares tiene menos probabilidades de tener defectos graves que lo hagan fallar en la ITV. Cambia el aceite y los filtros cuando corresponda, y revisa los frenos con frecuencia.

-Llevar la documentación correcta y actualizada. Ten contigo todos los documentos necesarios, como el permiso de circulación y la tarjeta de la ITV anterior, si es que ya se ha pasado antes, para pasar precisamente después y hacer la solicitud para la tarjeta ITV con IMD-Ingeniería vigente.

-Hacer una limpieza profunda. Llevar el coche, moto u otro, limpio, tanto por fuera como por dentro, ya que ayuda a que los inspectores puedan hacer su trabajo sin problemas.

-Hacer una ITV previa. Evalúa la opción de contratar un servicio como: https://imd-ingenieria.com/homologaciones-itv-para-coches/, para una revisión previa, o si tienes otro medio, ubica el servicio ajustado para ello en pro de ahorrar tiempo y dinero.