Una de las singularidades del carnaval villafranquero es su tradicional Fiesta de Ánimas Benditas y Mayordomías, punto de encuentro entre religión y tradición que permite conservar en este municipio toledano, desde hace siglos, los rituales de culto a los muertos, mediante ritos y símbolos como el Oficio de Vísperas, los desfiles de mayordomías, los bailes de banderas o el Ofertorio.
Esta fiesta, declarada de Interés Turístico Regional, lleva celebrándose en el municipio 350 años, tal como se ha explicado esta tarde en el acto, en el que se han tenido palabras de solidaridad hacia la localidad vecina de Herencia, que ha suspendido todos sus actos de Carnaval tras la muerte de un joven de 28 tras sufrir una paliza.
Tras el ofertorio y los actos de la bandera, ha dado comienzo el desfile de Carnaval, en el que se han dado cita vaqueros del oeste, muñecas de trapo, payasos, africanos, Hamlet o el fondo del mar, todo ello de la mano de comparsas ya conocidas en la zona como Harúspices de Tomelloso, Peña Los Morenos de Puerto Lápice o El Chaparral de Las Mesas (Cuenca).