Sindicalista de UGT y militante del PSOE, tuvo que resolver importantes problemas, durante su etapa como alcalde. Entre otros, el foco de insalubridad que era entonces la Veguilla; la aprobación y concesión del hospital; o el cierre de empresas relevantes relacionadas con el ferrocarril, como Devis y Macosa.
En el libro editado por el Ayuntamiento para conmemorar los 30 años de democracia, Reguillo considera, al valorar la vida municipal, que “cada persona tiene su lugar y su tiempo, y tampoco hay que desgastarse en los cargos. Es bueno ver que gente nueva coge las riendas cada cierto tiempo”.