La ciudad de Alcázar de San Juan recuperará pronto el servicio de préstamo de bicicletas municipal, según un acuerdo adoptado ayer en la sesión de Pleno celebrada correspondiente al mes de marzo, donde, como paso previo, se creó una nueva tasa para la prestación del servicio y se eliminó la que ya existía en desuso.
Según explicó el Equipo de Gobierno, ya están preparadas las 43 bicicletas para volver a prestar el servicio, con estacionamientos instalados en la Plaza de España, el parque Cervantes y las inmediaciones del pabellón Antonio Díaz Miguel. Estas bicicletas se han recuperado del servicio que se dejó de prestar, y ahora vuelven a estar disponibles para todos los alcazareños y alcazareñas, al precio simbólico de 12 euros al año o de 1,5 euros para un día. Se utiliza a través de una App de móvil que ofrece el propio ayuntamiento. En el Pleno, la alcaldesa, Rosa Melchor, animó a los vecinos a utilizar este servicio como hábito de vida saludable que además favorece la consecución de una ciudad más sostenible y ecológica.
SERVICIO DE LIMPIEZA
La limpieza viaria, de edificios municipales y zonas verdes fue otro de los temas abordados por el Pleno. Puntos en los que, después de escucharse una vez más distintas intervenciones en favor de la prestación directa, se acordó separar por un lado el servicio de limpieza de edificios municipales y por otro la limpieza viaria, pasando el mantenimiento de zonas verdes, parques y jardines a prestarse con personal del propio Ayuntamiento y del Centro Especial de Empleo Abedul.
También se acordó constituir una comisión informativa de carácter especial para vigilar el funcionamiento del servicio de limpieza y el cumplimiento de los contratos. Estará formada por todos los partidos de la Corporación Municipal de forma proporcional a los concejales de cada grupo, con el objetivo de que la ciudad mejore y sea cada vez más limpia.
DESPEDIDA DE DIEGO ORTEGA
En este Pleno también tuvo lugar la renuncia y despedida de Diego Ortega, como concejal portavoz del Grupo Municipal del PP. Sus compañeros de Corporación le agradecieron el trabajo realizado, los esfuerzos por Alcázar, su calidad como persona, su saber estar y amabilidad, así como su compromiso.
La alcaldesa, Rosa Melchor, agradeció su dedicación a la ciudad “a pesar de tener una idea distinta, compartimos pasión por Alcázar”, dijo; le agradeció “el esfuerzo que supone aparcar el proyecto de vida para dedicarse al servicio a los demás”; y le deseó suerte, ante la decisión de dejar la política local, en su nueva etapa.
Diego Ortega por su parte se despidió manifestando que se queda “con lo que nos ha unido, la labor y compromiso de trabajar por Alcázar”; y animó a sus compañeros de Corporación “a que sigáis aportando lo mejor de vosotros, para poder iros algún día con la cabeza alta, como yo, con mis fallos y mis aciertos”.
MOCIONES DE LA OPOSICIÓN
Una de las mociones que mayor debate suscitó fue la presentada por Vox para conocer y aprobar el requerimiento de la Subdelegación del Gobierno de Ciudad Real en relación a la anulación de varios acuerdos adoptados en Pleno por los que se modificó la Relación de Puestos de Trabajo del Ayuntamiento, incorporando a la plantilla dos puestos de directivo (director de Servicios Administrativos y gerente de Cultura y Turismo).
Puestos que según la oposición, “no hacían falta y fueron creados para colocar a dedo o de forma discrecional a dos personas afines al PSOE, sin tener en cuenta los principios de mérito y capacidad” y han acarreado que la Subdelegación del Gobierno requiera información y la Abogacía del Estado presente un contencioso contra el Ayuntamiento de Alcázar. Contencioso que deberá resolver si la administración alcazareña tiene capacidad y competencias suficientes para incorporar a su RPT estos dos puestos o si por el contrario tiene que anularnos, tal y como explicó la concejal Ana Isabel Abengózar, quien aseguró que existe jurisprudencia favorable al respecto con ciudades y ayuntamientos de similar tamaño al de Alcázar que han creado puestos parecidos y justificó el procedimiento hablando de “discrepancias en la interpretación de la norma”.
La moción quedó desestimada, como también fue rechazada otra propuesta que presentó IU para quitar del callejero el nombre del rey emérito Juan Carlos I.
