El concejal de Festejos de Alcázar de San Juan, Benjamín Gallego, ha realizado un balance de los últimos carnavales, que se iniciaron el 20 de diciembre con el pregón, para continuar con los grandes desfiles. El mal tiempo hacía prever una suspensión del desfile infantil, pero se decidió trasladarlo al nuevo pabellón polideportivo, donde los colegios y academias pudieron mostrar sus espectáculos, aunque sin vehículos y con el graderío lleno, como ha explicado el concejal.
El 22 de diciembre si salió a la calle el Gran desfile de comparsas, con la participación de 17 grupos que reunieron a 1.100 personas. Los premios eran importantes: 2.500 euros para grupos con carroza y 1.400 para comparsas.
La ciclalgata, el desfile de disfraces en bicicleta está resultando más atractiva cada año. Fue el 26 de diciembre y participaron unas 400 personas, 345 con dorsales y el resto por libre.
Unas 200 personas participaron en el desfile de máscaras populares, con un premio de 300 euros para el mejor grupo y también tuvo mucha repercusión el entierro de la sardina, con su duelo y sus mesas camilla por la mañana en la plaza, donde se repartieron más de 30 kilos de pastas, 40 litros de mistela y 1.000 tortas en forma de sardina.
Según los datos de la Concejalía, en este Carnaval se han movilizado unas 3.500 personas, pero también ha habido muchas visitas a la ciudad, porque la repercusión económica de esta Fiesta de Interés Turístico Nacional “no es desdeñable”, según Gallego. Hubo un 90 por ciento de ocupación hotelera en esos días y son difíciles de calcular los efectos en el comercio y la restauración.
