Una de las actividades más destacadas de las fiestas de Moros y Cristianos de Alcázar de San Juan es el mercado medieval, inaugurado ayer por la alcaldesa Rosa Melchor y el concejal de Festejos, Benjamín Gallego. Una actividad que vuelve para dar respuesta no sólo a la demanda y entretenimiento del público, sino también para ofrecer una salida y favorecer la recuperación de la actividad económica de los artesanos y vendedores ambulantes.
Así lo explicó Gregorio Berjaga, presidente de la Asociación Don Qujote y Dulcinea, responsable del mercado, quien trasladó a la alcaldesa y al concejal los agradecimientos de todos los vendedores, por ayudarles a recuperar la actividad y por ser el primer pueblo de la provincia que permite la instalación de un mercado medieval desde el confinamiento. Agradecimientos que también pronunció al referirse al cambio de ubicación del mercado, instalado este año en el parque Alces para favorecer los distanciamientos entre puestos, la amplitud, las sombras y en general el cumplimiento de las medidas de seguridad anticovid.
El presidente de Alkasar, José Luis Carnero, también se refirió al cambio de ubicación para considerarlo favorable, pues resulta mucho más cómodo y fresco para todos. Agradeció al ayuntamiento la colaboración y a los artesanos su esfuerzo por venir a Alcázar de San Juan; y deseó, de cara a futuras ediciones, que la instalación en el parque Alces "sirva de precedente".
La alcaldesa por su parte recordó que estas fiestas han sido posibles gracias a la evolución favorable de la pandemia. Agradeció también a los artesanos su valentía y paciencia, "sobre todo porque han tenido que aguantar el tirón de muchos autónomos, sin actividad durante 14 años"; y les deseó éxitos comerciales. "Hemos entendido que había que seguir avanzando; la vacunación está muy avanzada y la situación, tranquila; y por eso hemos decidido organizar las fiestas, casi casi con todo, excepto con los desfiles, con exposición, espectáculos en la plaza de toros y otras actividades adaptadas para el disfrute de los vecinos de toda la comarca". En cuanto al cambio de ubicación, reconoció que el parque alces "es un sitio magnífico, también para que los vecinos vengan durante el fin de semana a disfrutar de este mercado medieval".
El mercado medieval no sólo consiste en la instalación de puestos, tambien tiene una programación de actos:
