Preocupación por la proliferación de macrogranjas porcinas en nuestra región

En el III encuentro regional de plataformas Stopmacrogranjas de Castilla-La Mancha se han diseñado la estrategia para el próximo año para poner freno a estas instalaciones

Representantes de Alcázar de San Juan y Manzanares pertenecientes a la plataforma “Acuífero 23 sin macrogranjas” han asistido al III encuentro regional de plataformas Stopmacrogranjas de Castilla-La Mancha celebrado en Mota del Cuervo el pasado sábado día 1 de septiembre. El encuentro ha servido, por un lado, para conocer la problemática de los municipios afectados y, por otro, para coordinar las plataformas y definir los objetivos a conseguir a nivel local y autonómico.

Existe una creciente preocupación por la proliferación de la ganadería industrial en nuestra región, debido a los problemas asociados a este tipo de actividad. En el caso de Alcázar de San Juan, se ha presentado un proyecto para la instalación de una macrogranja de 3.600 cabezas que consideramos muy negativo para nuestra localidad y que esperamos que no sea autorizado. Aunque hay normas para regular este sector, apenas hay control sobre su actividad, con lo que los casos de contaminación de acuíferos por purines son cada vez más frecuentes. La explotación estaría situada a pocos kilómetros de los pozos de captación de agua potable de Alcázar de San Juan y Manzanares, con el riesgo que ello conlleva. En la Mancha, el sostenimiento de la vida y nuestra actividad económica es claramente dependiente del buen estado de los acuíferos, que si llegaran a contaminarse producirían un impacto difícil de asumir. Por otro lado, el uso masivo y sistemático de antibióticos en este tipo de ganadería, con la finalidad acelerar el engorde de los cerdos o para prevenir las enfermedades debido al hacinamiento de los animales, provoca la aparición de bacterias multiresistentes haciendo que los antibióticos sean cada vez menos eficaces.

En lugar de favorecer la ganadería de tipo industrial de carácter especulativo que ofrece productos de bajo coste y baja calidad, creemos que las autoridades locales y regionales deben apostar por la ganadería extensiva tradicional, que respete nuestra salud, el medio ambiente y las condiciones de vida de los animales, que potencie las denominaciones de origen y los productos de calidad y saludables, un modelo de ganadería sostenible que fija población en nuestro campo y proporciona un sustento digno a muchas familias.

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