Rubén Arias: "Me voy porque no puedo aceptar el ver, oír y callar"

En  la rueda de prensa “más complicada y triste” de su trayectoria política (que comenzó hace 25 años en Juventudes Socialistas), Arias ha explicado que desde hace meses, concretamente desde el mes de mayo, cuando se abrió el proceso de Primarias del que salió elegido Pedro Sánchez como secretario general, ha venido siendo “ninguneado por la alcaldesa”, con quien “las discrepancias y distanciamiento han sido notorias y evidentes, incluso para los ciudadanos”. Distanciamiento aparejado al proceso de Primarias en el PSOE nacional que, según el hasta hoy concejal de Servicios Sociales, le ha ido relegando a un segundo plano y apartando de la actividad política municipal. “Entré con 17 años en Juventudes Socialistas y después de 25 años militando en el PSOE, me voy porque no estoy dispuesto a cambiar mi forma de pensar. Mi falta de sintonía con la alcaldesa es notoria y, después de tantos años, el sillón no me iba a cambiar. He visto en estos últimos cinco meses cómo he  dejado de ser portavoz municvipal, cómo se me ha ido apartando de la foto, de las intervenciones plenarias, de las ruedas de prensa, de los actos públicos y de todo lo que fuera visible”, ha señalado, añadiendo, como ejemplo y entre otras “gotas que han colmado el vaso”, que tuvo que enterarse por la prensa de la firma del mayor convenio que todos los años se hace desde el área de Servicios Sociales donde he estado siendo concejal, el convenio con Cruz Roja”.

“Entré en la Política con mucha ilusión; e incluso pedí excedencia en mi trabajo (como policía local) y estuve tres meses sin cobrar sueldo para formar parte de la candidatura de Rosa Melchor, para no incurrir en incompatibilidad. Tenía mucha ilusión; pero, tres años después, no tengo ninguna. Me siento como el enfermo terminal que vive enchufado a una máquina a la que un día decide desconectarse. En estos meses, he estado siendo un cadáver político y no puedo dejar que esta situación me afecte hasta en lo personal.  Por eso, hoy me hago la eutanasia política y me voy con la convicción moral de que voy a seguir siempre diciendo lo que pienso, porque no puedo ser de otra manera ni valgo para ser como el avestruz que mete la cabeza en el suelo y espera a que pasen los días sin solucionar los problemas. Se me han acabado las fuerzas de nadar siempre contra corriente”, ha dicho.

En cuanto al momento de su decisión, ha reconocido, contestando a preguntas de El Semanal, que se ha esperado  a que pase el Congreso regional “para no interferir de ningún modo”; y ha explicado, consciente de que “en los próximos 20 días sufriré ataques de los de dentro y de los de fuera”, que ha sido  en esta fecha porque “todavía quedan 20 meses de legislatura y creo que quien entre en mi lugar (según la lista, Patricia Benito), tendrá suficiente tiempo para ponerse al día”.

En cuanto al resto del Equipo de Gobierno, ha indicado que “no ha tenido ningún enfrentamiento en particular con ninguna de sus compañeros y ha tenido palabras de reconocimiento para  la anterior concejala de Servicios Sociales, Carmen Sarrión; así como para “otro compañero, a quien le digo por favor que aguante,  porque vas a ser el siguiente”.

Para terminar, Arias ha explicado que seguirá afiliado al PSOE como militante de base y a disposición de la agrupación local para lo que resulte necesario; y no ha descartado volver a la actividad política después de algún tiempo, aunque, de momento, según sus palabras y gestos, dejará pasar el tiempo. “Dejo la Política y me vuelvo al puesto de trabajo que gané por oposición hace 18 años, con la cabeza alta y sin reproches. Pero seguiré afiliado al PSOE y estaré donde mis compañeros de partido me digan, delante o al lado, pero nunca enfrente”.