Zúñiga: «Espero devolver a esta Plaza el nivel que se merece»

La Feria de Alcázar de San Juan volverá este año a contar con un cartel y una corrida de toros de primer nivel, gracias a la empresa que dirige el vallisoletano Carlos Zúñiga (padre), adjudicatario del coso alcazareño, empeñado en devolver a la afición manchega y a esta plaza el nivel que nunca debió perder. Para ello, con la colaboración de la Comisión Taurina y el Ayuntamiento y después de salvar ciertas vicisitudes (ya que primero ha tenido que dejar la plaza la empresa que el año pasado contrató el festejo, que fue la de su hijo), Zúñiga (padre) trae a la Feria de Alcázar un cartel atractivo y de primer nivel. Según explica en declaraciones a El Semanal, «un cartel que rompe moldes y pone toda la carne en el asador, pensado para una ciudad saneada como la de Alcázar, donde el toro gusta y donde hacen falta figuras y un cartel atractivo para que la afición, tanto de dentro como de otros pueblos, vuelva a cubrir toda plaza».
    De esta forma, Enrique Ponce, José Antonio Morante de La Puebla y Jesús Martínez «Morenito de Aranda», conforman el cartel de Feria, con toros de Las Monjas. Será este domingo, a partir de las seis y media de la tarde.

CORRIDA EN CONSONANCIA

Con la castellana frase «según es el burro, así es su albarda», Zúñiga explica que, una vez contratadas las figuras, la corrida debía ir en consonancia con el cartel. «La corrida tenía que ser buena, del agrado de los toreros, bonita, bien hecha, con su cara correspondiente, armónica y casi perfecta». Y por ello, pensó en los astados de Las Monjas; aunque, tal y como matiza, «en el mundo de los toros, el empresario propone y los toros disponen». Toros que pudieron ser  vistos hace unas semanas por la Comisión Taurina y por el concejal de Asuntos Taurinos, Gonzalo Redondo, durante una visita a la finca de Lora del Río, causando en ellos muy buena impresión.

DEVOLVER EL NIVEL Y LA ILUSIÓN

«Sin que nadie se moleste», tal y como recuerda el propio Carlos Zúñiga, la fiesta de los toros en Alcázar de San Juan ha atravesado, durante los últimos años, momentos complicados debido a diferentes circunstancias. Por un lado, está la pérdida paulatina de la ilusión, por parte de la afición, obligada a vivir momentos «un tanto desagradables», fruto del desencanto y de la falta de seriedad de algunos empresarios y toreros que por distintos motivos se cayeron de sus carteles (accidentes, lesiones de final de temporada o simple desgana). Y por otro lado, la crisis y dificultades económicas que aún sigue existiendo y que condicionan la respuesta de la afición ante un espectáculo que, tal y como reconoce el empresario, «es caro y no atraviesa sus mejores momentos, debido a la falta de ayudas y a la persecución que padece por parte de los sectores antitaurinos».

    «La fiesta está un poco desordonada en la actualidad por todas estas vicisitudes, pero, es la fiesta de España por excelencia. No hay feria que se precie sin corrida de toros; a pesar de los movimientos taurinos, sigue teniendo mucha fuerza porque es una tradición española muy arraigada en la sociedad, muy metida en el pueblo y tenemos que seguir luchando para ponerla de nuevo en pie y que se mantenga», considera Zúñiga, pidiendo a la afición que acudan a la plaza y respondan con su masiva presencia a las críticas y a los movimientos antitaurinos.

PRECIOS «EQUILIBRADOS»

En cuanto a los precios del festejo del domingo (entre los 105 euros, la más cara; y 25 euros, la más barata), el empresario indica que se ha procurado ofrecer «precios equilibrados», acordes con el festejo. Reconoce y reitera que «los toros son un espectáculo caro», pero recuerda que contratar a las figuras resulta muy costoso; y precisamente por ello, matiza, que prefiere cargar este espectáculo (único a lo largo del año en Alcázar de San Juan) con un buen cartel a ofrecer varios festejos de menor nivel.

    Respecto a la venta de entradas, afirma que «va bien»; y recuerda que, además de las que se han vendido a través de las Penas Taurinas El Capote y Aníbal Ruiz, pueden adquirirse hasta el domingo en las taquillas de la Plaza. «Ojalá y la plaza se ponga a reventar», concluye Zúñiga ilusionado, deseoso de que la afición responda favorablemente y la plaza de Alcázar de San Juan vaya recuperando el nivel que se merece.

    Recordar, como punto y final, que los toros podrán ser visitados por los aficionados que así lo deseen, durante su estancia en los corrales. El festejo del domingo dará comienzo a las 6,30.